"En estos dos años y medio de trayectoria nunca hemos pedido nada, pero ahora nos vemos obligados a solicitar ayuda porque los gastos que hemos tenido durante el último mes nos han desbordado". Es la llamada de auxilio que lanza la Protectora de Animales Aloia de Tui, una asociación que cuida a doscientos perros abandonados y cuyos gastos se han disparado hasta tal punto que, si no reciben ingresos adicionales, no podrán hacer frente a los pagos de diciembre.
La protectora desembolsa mensualmente una media de 3.000 euros. Además de alimentar a los canes, vacunarlos, desparasitarlos y esterilizarlos, el colectivo también corre con los gastos de castración de las mascotas de personas sin recursos. Todo esto hace que los ingresos, procedentes de una subvención del Concello de Tui, la recaudación de mercadillos, la cuota de los socios y las donaciones, sean insuficientes. Por ello, con la cuenta a cero para afrontar futuros pagos, la protectora pide que le "echen una pata". "Un donativo, por muy pequeño que sea, nos puede ayudar mucho", indica Pepín Solleiro, miembro de la asociación que facilita este número de cuenta para hacer donaciones: ABANCA ES21 2080 5066 7230 4003 1907.
"Para nosotros lo primero es el bienestar de los animales", recalca Pepín, que advierte de la necesidad de esterilizarlos para que no sucedan episodios como el ocurrido hace dos semanas en la parroquia de Areas. "Una mujer encontró a seis cachorritos envueltos en una bolsa de basura tirada en un contendor; gracias a que los escuchó agonizar pudimos salvarlos. Apenas tenían tres días de vida y estaban empapados", cuenta Pepín Solleiro. Los seis canes están ahora a cargo de la Protectora de Animales Aloia de Tui y buscan un hogar. Al igual que los otros doscientos perros que se encuentran repartidos entre el refugio de Guillarei y las casas de acogida de los voluntarios que hacen posible que la asociación continúe dando una segunda oportunidad a los animales abandonados.
