La peregrinación de la parranda de San Pedro llevó ayer a San Roque de Morgadáns a más de 800 romeros, en una tradición que cumplió este año 102 años.

Según informa Carlos Riveiro, que fue un año más el encargado de la subasta, pasadas las nueve de la mañana el alcalde de Nigrán, Juan González, dio la salida a la comitiva.

Además de los romeros a pie, un camión y varios tractores formaban parte de la peregrinación. Uno de los tractores retrasó la comitiva al pincharse las dos ruedas al poco de salir.

La peculiar peregrinación, que nació hace más de un siglo, con un motivo claramente religioso, se realiza en la actualidad exclusivamente como diversión y por tradición.

Desde Nigrán y por caminos locales la marcha llegó hasta Gondomar, donde fueron recibidos por el alcalde Paco Ferreira y participaron en un pasacalles con la charanga y la Banda de Música de Redondela.

Los peregrinos llegaron a San Roque de Morgadáns sobre las 12 de la mañana. Al llegar degustan empanadas de diversos sabores.

Los miembros de la parranda lucían ayer una camiseta conmemorativa de color azul celeste. Muchos de ellos asistieron a la misa y procesión de San Roque y posteriormente a la subasta.