Redondela retira más de 300 nidos de avispa asiática, una plaga que se multiplicó por diez en tres años

El gobierno local iniciará esta semana los trabajos de la segunda fase de la lucha contra la invasión de la avispa asiática con la colocación de trampas. Las medidas de seguridad se instalarán en las zonas públicas donde se concentran más personas, como las plazas, parques infantiles, entorno de colegios y playas.

La primera fase de los trabajos se desarrolló entre los meses de mayo y diciembre, en los que se procedió a la retirada de nidos de esta especie en todas las parroquias. En total, se eliminaron más de 300 nidos de avispa asiática en el término municipal. Esta es una cifra al alza puesto que desde que se contabiliza esta acción, en 2015, la cantidad no dejó de crecer. En ese año tan solo se retiraron 35 avisperos, pero ya en 2016 la cifra fue incrementando hasta los 100 nidos retirados. En 2017 la cifra aumentó hasta las 200 colmenas.

Los trabajos fueron atendidos por orden de prioridad, sacando en mayo los avisperos más próximos a las viviendas, centros escolares y parques infantiles. Por último, ya en los meses de otoño e invierno, la actuación continuó por las zonas de fincas, montes y arroyos lejos de viviendas.

El alcalde redondelano, Javier Bas, destaca la importancia de las medidas de control que lleva a cabo el Concello cada año, recordando también que "el medio ambiente es una tarea de todos". En este sentido, el regidor local hace un llamamiento a la colaboración de todos los vecinos para que se pongan en marcha medidas de prevención contra esta especie invasora, especialmente si se cuentan con plantas o árboles de origen asiático en sus jardines, tipo camelia o palmeras. Bas explica que en cada nido de velutina pueden convivir entre unas 3.000 y 5.000 avispas, y salen unas 200 reinas, que serán las que colonicen nuevos nidos la siguiente temporada.

Por su parte, el edil de Medio Ambiente, Miguel Ángel Álvarez, destacó que algunos de los nidos que aún son visibles a día de hoy no se retiraron por considerarse inactivos y los expertos indican que es recomendable en estos casos esperar que se caigan.