El equipo de gobierno de Salceda de Caselas encabezado por su alcalde, Marcos Besada, denunció en el cuartel de la Guardia Civil injurias en las redes sociales.

En concreto la denuncia se realiza por amedrentamiento, injurias e incitación al odio "que se están viviendo en las últimas semanas, fundamentalmente sobre la figura del alcalde, pero también sobre el resto de componentes del equipo de gobierno", informó el Concello en un comunicado.

El gobierno local hace referencia al último hecho "de una cadena de acontecimientos" que sería la puesta en circulación vía whatsapp "de un vídeo cargado de insultos y descalificaciones para el alcalde y los concejales y concejalas, con una clara intención de incitación al odio" que el gobierno local pida que sean investigados. En el vídeo se ven una sucesión de imágenes del alcalde y miembros del gobierno sobre la canción "Rata de dos patas" , popularizada por Paquita del Barrio, que incluye insultos como "rata inmunda", "sabandija", "infrahumano", "alimaña", "culebra ponzoñosa" o "cucaracha".

"A este vídeo tienen que añadirse capítulos de vigilancia a la casa del alcalde así como de seguimientos en los trayectos desde el Ayuntamiento hasta su propia vivienda", afirman.

El regidor local le trasladó a la Guardia Civil a sensación de "inquietud, ansiedad y preocupación" que le toca vivir tanto al equipo de gobierno como a sus familias, recordando que incluso su pareja, persona ajena a la política, aparece en una imagen en el vídeo denunciado.

Insisten desde lo equipo de gobierno en que "son hechos y discursos intolerables; representamos al conjunto de los 9.140 vecinos y vecinas de Salceda, independientemente de su ideología, de sus creencias, o de su origen, y los cargos públicos que en este momento nos dedicamos al noble 'oficio' de ser representantes públicos escogidos y escogidas democráticamente no podemos ser las víctimas sobre las que trasladar las frustraciones personales con total impunidad: no lo podemos permitir", indican.

El gobierno local informa que existe numerosa jurisprudencia que demuestra que cuando se profieren insultos de carácter personal sin estar referidos ni relacionados con ningún hecho en concreto no hay absolutamente nada que pueda justificar la injuria, "ni existe derecho ninguno a la libertad de expresión que proteger, y este es, exactamente, el caso del vídeo del que ahora se presenta la denuncia, ya que no se hace referencia a ninguna clase de hecho o actuación concreta de gobierno, sino que simplemente consiste en un recopilatorio de insultos y descalificaciones".