Cuidado del patrimonio histórico y cultural y seguridad vial. Son los dos principales factores que han llevado al Concello de Baiona a impedir el tránsito de vehículos de cuatro ruedas por la Ponte Nova de Sabarís. Se trata de un viaducto de origen medieval integrado en el Camiño Real, que coincide en esa zona con el Portugués da Costa, una ruta jacobea al alza para la que el Ayuntamiento elabora un proyecto de recuperación integral.

A las quejas de vecinos por el exceso de velocidad de numerosos vehículos a su paso por el puente y los riesgos de accidente que ocasionaban se suman las repetidas roturas de los pretiles causadas por la circulación de vehículos, especialmente pesados como camionetas, cuyo tamaño ponía en peligro la integridad de la estructura. Así lo explica el alcalde, Jesús Vázquez Almuiña, quien asegura que los operarios municipales han acudido a repararla en varias ocasiones por este motivo en los últimos años.

El gobierno municipal valoró varias opciones para resolver el problema, señala el regidor, pero finalmente se decidió por el cierre del puente en ambos extremos. Así, argumenta el alcalde "garantizamos la accesibilidad a los habitantes del entorno, tanto desde la glorieta de la autopista como desde Porta do Sol". Para los conductores que optaban por este vial como alternativa de comunicación con el centro de Sabarís, "existen buenas alternativas", afirma en referencia a Porta do Sol y la avenida litoral.

Técnicos de la Dirección Xeral de Patrimonio de la Xunta avalan la decisión municipal de cerrar al tráfico el puente para favorecer su protección. Y es que la medida es un primer paso, indica Vázquez Almuiña, para la "recuperación integral del entorno, con edificaciones antiguas bien conservadas". Según explica el alcalde, el gobierno local elabora un proyecto de rehabilitación del Camiño Portugués da Costa que recuperará la calzada medieval empedrada, hoy oculta bajo el asfalto, y soterrará el cableado a su alrededor.