El Celta está buscando la manera de reconectar a la afición con Balaídos. Ni un día había pasado desde que el club pidió a sus abonados que participasen en una lluvia de ideas para fomentar la asistencia al estadio, cuando desde sus redes sorprendieron a todos con el anuncio de un centenar de entradas baratas para el partido del viernes contra el Espanyol (21.00 horas). Eran localidades a 10 euros para cualquier zona en una jornada que en las que los precios oficiales llegan a los 48 o 53 euros en las gradas laterales.

Esas entradas a 10 euros volaron. La buena acogida de la iniciativa impulsó al Celta a poner una segunda remesa de otras cien entradas al mismo precio, que también se agotaron en cuestión de minutos. En dos horas el club vigués había despachado 200 localidades.