No por esperada, la noticia ha sido menos reconfortante: Iago Aspas está de vuelta. Después de completar sin molestias dos entrenamientos con el grupo, el delantero celeste recibió ayer el alta médica y estará a disposición de Eduardo, el Chacho, Coudet para el compromiso liguero del próximo domingo ante el Granada (Los Nuevos Cármenes, 18.30 horas).

La estrella celeste volverá al once contra los nazaríes después de tres jornadas ausente por una lesión muscular que se produjo en el primer compromiso liguero del año, contra el Real Madrid ,después de recibir una dura entrada de Nacho. Los servicios médicos diagnosticaron al jugador morracense una rotura fibrilar en el bíceps femoral de su pierna derecha con un pronóstico de recuperación de entre tres y cuatro semanas, que ahora acaban de cumplirse.

Eduardo Coudet incluyó al jugador en la convocatoria sin alta para el último partido contra el Eibar para el caso de que pudiese recuperarse en el último momento, pero finalmente se prefirió no arriesgar en previsión de que pudiese sufrir una recaída.

El retorno de Aspas a los terrenos de juego es vital para el Celta, que no gana un partido sin el moañés en el campo desde hace dos años, concretamente desde el 28 de enero de 2019 cuando el equipo vigués derrotó al Sevilla en Balaídos por 1-0 con gol de Okay Yokuslu.

No es Aspas el único futbolista que el Chacho recupera para el duelo ante los de Diego Martínez. El preparador celeste podrá contar también con Denis Suárez, ausente la pasada jornada por acumulación de tarjetas, y podrá disponer también del centrocampista argentino Augusto Solari.

Coudet no va a poder contar en cambio con Okay, que hoy viajará a Inglaterra para formalizar su cesión al West Bromwich Albion y, aunque todavía podría jugar un partido más, es improbable que convoque a Lucas Olaza, pendiente de concretar su salida al Valladolid.