Las armas de destrucción masiva son peligrosas incluso cuando no se utilizan. Su poder intimidatorio radica en el miedo que provoca con el simple hecho de invocarlas como amenaza. Y en un artefacto de ese calibre se ha convertido Iago Aspas para el Celta, que se siente más débil y desprotegido cuando no puede contar con su goleador. Los rivales, de hecho, no ocultan su satisfacción cuando Aspas es baja. Ayer, José Luis Mendilibar advertía de que teme al céltico incluso cuando está en el banquillo, y el entrenador del Eibar recordaba a continuación cómo su equipo fue eliminado de la Copa del Rey después de que Aspas irrumpiese en el partido en la segunda parte.

Y apenas un par de horas después de que Mendilibar soltase esa frase en la rueda de prensa posterior al último entrenamiento del Eibar antes de viajar a Vigo, su homólogo Eduardo Coudet anunciaba también en comparecencia pública que convocaría a Iago Aspas para el partido de esta tarde contra el equipo armero. El moañés, que sufrió una lesión muscular el 2 de enero en Valdebebas, ha comenzado a trabajar con balón pero no con sus compañeros. Ni siquiera cuenta con el alta médica, pero entró en la lista de veintidós que ofreció el técnico argentino. Coudet también recupera a Lucas Olaza –que podría despedirse hoy como céltico si no hay arreglo económico entre Celta y Boca Juniors– y a Jeison Murillo, que era duda después de solicitar la sustitución ante el Betis por problemas físicos. Contra los béticos causó baja Olaza por precaución sobre el coronavirus, pero el uruguayo ha superado los dos test PCR.

La baja más importante esta tarde de los célticos será Denis Suárez, por sanción, tras agotar el cupo de tarjetas amarillas. Con ese panorama, Coudet podrá presentar un once similar al que el miércoles encadenó la tercera derrota del campeonato, después de un diciembre fantástico. Olaza entrará por Aarón Martín, Brais Méndez ejercerá seguramente de Denis, con lo que Coudet daría entrada a Baeza o a Beltrán para completar la línea de tres cuartos junto a Nolito, con Emre Mor acompañando a Mina en la punta del ataque. El turco se reencuentra con el Eibar, después de convertirse en la pesadilla de los azulgrana en la primera vuelta.

El conjunto guipuzcoano por su parte, pierde a Arbilla por acumulación de cartulinas, y a Kevin Rodríguez, por lesión, aunque recupera a Bryan Gil, una de sus referencias en el juego ofensivo. Los eibarreses son ahora un rival muy complicado como visitante. De los 19 puntos con que cerraron la primera vuelta (cuatro menos que el Celta), doce los lograron a domicilio. Han ganado en casa del Valladolid, Sevilla y Betis, además de sumar empates en San Sebastián, Barcelona y Huesca.

A Vigo acuden, según Mendilibar, a intentar desmontar el plan de Coudet planteando un juego incómodo, de los que se le atragantan a un Celta que no ha encontrado alternativas cuando le cierran los espacios y le obstaculizan el juego asociativo por el centro o por las bandas. En esos casos, acaban sucumbiendo por errores propios en el inicio de la jugada, como ayer recordaba el entrenador argentino.♦

El Celta regresa al lugar donde cayó por goleada con el Villarreal (0-4) por errores no forzados. Necesitan acostumbrarse los de Coudet a volver a ganar. No lo logran desde que el 30 de diciembre cerraron una racha magnífica de cuatro triunfos y un empate.

El Eibar se presenta con su portero Dmitrovic como protagonista de la jornada pasada al marcar de penalti ante Oblak, aunque el gol no evitó la derrota frente al líder. Ese tropiezo ha dejado a los de Mendilibar a solo dos puntos de los puestos de descenso.

El técnico vasco optará probablemente por colocar en el lateral al portugués Soares, al que ha alineado en los últimos partidos, en algún caso incluso desde el inicio, para suplir la baja de Arbilla.

En la parte positiva, el entrenador del Eibar contará con las altas de Rafa Correa, la sorpresiva de José Ángel Valdés ‘Cote’ que ha estado seis meses lesionado por su rotura de ligamento, y la de Bryan Gil.

No obstante, ninguno de los tres, que fueron convocados el jueves, jugaron ante el Atlético de Madrid, con lo que dependerá de su evolución en este breve período de tiempo que puedan disfrutar de algunos minutos en Balaídos, o en el caso del barbateño Gil ser incluso titular.

El Celta, por su parte, incluye en la convocatoria a Iago Aspas, su arma de destrucción masiva y una amenaza latente para el Eibar o cualquier otro rival.