El técnico del Valencia, Javi Gracia, apuntó antes de visitar al Celta, que uno de los objetivos que tiene el equipo es "ser fiable" en sus compromisos a domicilio. "Vimos lo que costó el año pasado como visitante y lo que queremos es mejorar", apuntó el entrenador en una rueda de prensa en la que elogió la capacidad ofensiva del conjunto vigués y advirtió a su equipo que debe mejorar atrás.

"El Celta en casa tiene un gran peligro con jugadores arriba de mucha calidad. Tenemos que mejorar la faceta defensiva no solo por los goles encajados contra el Levante sino por las sensaciones y facilidades que dimos porque el resultado pudo ser completamente diferente", reconoció.

El entrenador dijo que le preocupan los "contratiempos" físicos que arrastran algunos de sus jugadores, mostró su esperanza por poder contar con Carlos Soler en "una o dos semanas" y señaló que no cree "que vaya a verse un partido especialmente abierto desde el comienzo".

Gracia evitó cifrar un objetivo clasificatorio para esta campaña. "No hay otro objetivo más importante y prioritario que ganar ese partido, tratar de ganar cada partido y de ir sumando puntos para ver dónde estamos. La plantilla está por cerrar y habría que esperar a ver cómo se cierra y su comportamiento. La autoexigencia para mí no es que sea Europa o ir a la Champions sino tratar de ser el campeón y el mejor, esa tiene que ser nuestra ambición. Veremos la competición donde nos pone", dijo.

Comentó el hecho de que en el Celta pueda jugar Murillo que esa semana pudo haber fichado por el Valencia. "Es una circunstancia un poco curiosa porque se ha dado esta casualidad. No sé hasta qué punto ha estado cerca de venir al Valencia. Lo desconozco. No sé explicar por qué un jugador no viene", reconoció.