El Celta se fue al Estadio Romano cargado con las cadenas que le oprimen en la Liga y regresa liberado. Aunque fuese en segunda ronda de Copa del Rey ante un rival menor, los jugadores celestes por fin terminaron un partido con una sonrisa y cargados de buenas sensaciones. El equipo de Óscar García, con cinco titulares habituales en el once, hizo valer la lógica, goleó al Mérida (1-4) y selló su clasificación para los dieciseisavos de final de Copa. Un triunfo cómodo en el que valieron el doblete de Santi Mina y los goles de Pione Sisto y Brais Méndez. La mala noticia llegó en los minutos finales en forma de lesión. Néstor Araújo tuvo que retirarse con un esguinde en su rodilla derecha. El martes, 14 de enero, se celebra el sorteo en el que el Celta conocerá a su próximo rival.

Óscar García era consciente de que este partido de Copa frente a un adversario de Segunda División B podría servirle para reconectar a algunas de sus piezas más importantes. Por eso mismo no salió a especular en su visita al Mérida. El técnico catalán configuró un once muy parecido al que podría presentar dentro de una semana en San Mamés. Con Sergio en portería; Mallo, Araújo, Costas y Olaza formaron en defensa. Por delante; Beltrán, Pape, Brais, Juan Hernández, Sisto y Mina. El Celta no iba a especular, quería encarrilar el pase por la vía rápida.

Y así lo hizo. Las llegadas al área emeritense no se hicieron esperar. Pione Sisto, que fue el celeste que mejor se lo pasó en el primer tiempo entre regate y regate, estrelló un balón contra el lateral de la red a los once minutos y poco después le puso un gran centro a Juan Hernández que el lorquino envió por encima del larguero. Entre medias, Araújo cabeceó alto tras un saque de esquina botado al primer palo.

A los 21 minutos Santi Mina destapó el tarro. El vigués se lanzó en plancha para rematar un centro de Brais Méndez desde la izquierda. El delantero celeste tenía hambre de gol porque segundos después lamentó con rabia una ocasión fallada. El Celta se lo estaba pasando bien a costa de un Mérida que no era capaz de tapar todos los agujeros que encontraban los de Óscar García. El segundo tanto llegó en forma de cañonazo. Sisto, desde muy lejos, enganchó un derechazo que voló plano y colocado al palo izquierdo de la portería que defendía Javi Sánchez.

La afición del Estadio Romano, por su parte, pudo irse al descanso con la esperanza del milagro. Poco después de un paradón de Sergio a Iosu Villar, el colegiado señaló penalti por una mano muy dudosa de Hugo Mallo dentro del área. Gonzalo Poley engañó al guardameta de Catoira desde los once metros y volvió a meter a los extremeños en la eliminatoria justo antes del intermedio.

Pero tan pronto se reanudó el juego Hugo Mallo, autor del supuesto penalti poco antes, provocó otro en el área rival. Brais Méndez fue el encargado de hacer el 1-3 y anular cualquier ilusión del Mérida, que poco después tuvo que volver a recoger otro balón del fondo de su portería cuando Santi Mina aprovechó el error de uno de sus centrales para hacer su doblete particular.

En los minutos finales Óscar García dio entrada a Denis Suárez, recuperado de su tobillo, a Kevin y a Iker Losada. El juvenil sustituyó en el minuto 80 a Néstor Araújo, que en un lance del encuentro sufrió un esguince proximal del ligamento lateral interno de su rodilla derecha. En Vigo se le realizarán más pruebas médicas para determinar el alcance de su lesión pero como mínimo se perderá el partido frente al Athletic Club. Antes del pitido final lo intentaron Beltrán y Denis Suárez, pero sus remates se fueron a las manos del portero y por encima del travesaño. El Celta estará en el bombo de los equipos que disputarán los dieciseisavos de final. El sorteo, el martes. El próximo duelo, el 22 de enero.

Los goles del partido