El Celta incrementa su masa social con 800 nuevos socios

El celtismo vive momentos de apogeo a las puertas de la temporada 2019-20, en la que el equipo vigués competirá por octavo año consecutivo en la élite con diez jugadores formados en su cantera, de los que siete incluso cuentan con muchas posibilidades de formar parte del once inicial. La confección de la nueva plantilla con el regreso de dos hijos pródigos, Denis Suárez y Santi Mina, ha generado ilusión entre una afición que el curso pasado fue premiada como la mejor de LaLiga y que resultó clave en la pelea que libró el equipo por la permanencia en la máxima categoría.

La ilusión del celtismo a la que días atrás aludía David Costas se ha visto reflejada en la campaña de abonados con un incremento en el número de socios que no se veía desde hace seis temporadas. Según los datos facilitados ayer por el club, la masa social del Celta ha aumentado en 800 abonados, teniendo en cuenta que el 90 por ciento de los socios ya renovaron su carnet para el curso que viene. Además, desde A Sede se subraya que unos 1.800 aficionados se han inscrito en la lista de espera de nuevos abonados.

"A día de hoy, el RC Celta tiene ya 800 abonados más que la pasada campaña", apunta el club que preside Carlos Mouriño.

Este incremento contrasta con la disminución progresiva que sufrió la masa social céltica en los últimos años, desde el curso 2013-14. En ese momento, el número de socios, según los datos oficiales, ascendió a 23.483, superando en más de mil a los que se sumaron al proyecto de Primera División después de que el conjunto celeste diese por finalizada una etapa de cinco años en la categoría de plata.

Ese ascenso a la élite supuso un incremento espectacular de socios en Balaídos, pasando de 14.308 en el curso 2011-12 a los 22.321 de la campaña siguiente.

La nueva experiencia en Primera estuvo a punto de fracasar: el equipo evitó el descenso en la última jornada. Con la contratación de Luis Enrique Martínez y la llegada de futbolistas como Rafinha y Nolito, el celtismo elevó su ilusión por el proyecto deportivo y la masa social de Balaídos se situó entonces en 23.483 aficionados. Ese continúa siendo el tope de socios del Celta en la presidencia de Mouriño, que accedió al cargo en mayo de 2006.

En años sucesivos al curso 2013-14, el número de abonados fue descendiendo una media de quinientos por curso. La caída se frenó el curso pasado, donde el club apenas perdió apoyos: 86 aficionados menos, según los datos oficiales.

Los nuevos registros apuntan a que podría producirse un incremento de 800 socios, siempre que se alcance el cien por cien de renovaciones. El porcentaje de fidelidad es del 90 por ciento. Desde A Sede transmiten optimismo. "La afición celeste, fiel, animosa y condecorada hace escasos meses como la mejor de todo el país, se ha empapado de la ilusión que genera el RC Celta y ha respondido con contundencia en la campaña de abonados", que el club definió con el mensaje "Isto vai de corazón".

"Son más de 1.800 los aficionados que han reservado asiento y han comenzado a formalizar las altas, cifra sensiblemente superior a la registrada en las últimos años, mientras que el número de renovaciones también ha sido más elevado que en campañas anteriores, lo que supondrá que la masa social celeste crezca para la campaña que ahora comienza. Más del 90% de los socios de la pasada temporada tramitaron su renovación en el primer plazo y todavía se están gestionando carnets. RC Celta y afición siempre caminan de la mano. En los malos y en los buenos momentos, el celtismo ha acompañado y empujado al equipo, una unión irrompible que se ha ido forjando con el paso de los años", manifiestan desde A Sede de la calle del Príncipe.