Varias localidades gallegas, de la Rioja y de Aragón contarán con un trozo de Balaídos, las sillas que el ayuntamiento ha renovado en la Grada de Río. En total, ya se han repartido 5.650 de los antiguos asientos blancos y celestes que servían de acomodo para los aficionados del graderío que se remodeló durante la temporada 2017-18. El próximo curso habrá nuevos asientos. Los viejos se han ido a distintos campos de fútbol de equipos modestos e incluso a un club de hípica de la provincia de Pontevedra.

La primera partida de asientos se le adjudicó al club UD Alhama aragonés, que incluso prometió bautizar la zona donde los ubicará con el nombre de Grada de Río, como homenaje a la generosidad de los célticos.

Adjudicadas y entregadas ya esas 150 butacas de plástico, la Federación Gallega de Fútbol se ha ofrecido para repartir el grueso de las mismas entre clubes de la comunidad con escasos recursos económicos.

"Una nueva vida para unas butacas llenas de recuerdos, emociones, lágrimas de tristeza y alegría... historia del RC Celta y el celtismo", señalaba ayer el club vigués en las redes sociales al recordar que donaba 5.650 butacas de Balaídos.

La federación ha repartido 1.400 asientos: FC Céltiga, de A Illa de Arousa se lleva 400; el equipo de Viana do Bolo, 300; el CD Mosteiro, 700; y el FC Tyde, 600. Al Club Hípico Alazán le corresponden 200; mientras que el EF Arnedo se llevó para La Rioja 1.200. El redondelano equipo del Vilar de Infesta, 100; por las 300 que recibirá el San Juan de Rubiós. El Calo SR también se lleva 300 asientos del estadio vigués. Este reparto se completa con las 150 butacas que los dirigentes de la UD Alhama recogieron en Vigo para llevárselas a Zaragoza.