La última derrota encajada ante el Betis en el estreno de Fran Escribá al frente del banquillo del Celta ha desnudado el problema de falta de gol que atraviesa el cuadro celeste desde que Iago Aspas cayó lesionado a finales de diciembre pasado en el Camp Nou.

El partido contra los de Quique Setién fue el tercero consecutivo de los celestes en blanco, una circunstancia que no se repetía desde hace tres años, concretamente desde el curso 2015-16, cuando el equipo dirigido por Eduardo Berizzo cayó consecutivamente frente al Athletic en Balaídos (0-1), el Málaga en La Rosaleda (2-0) y el Atlético de Madrid, también en el estadio vigués (0-2), entre las jornadas decimonovena y vigésimoprimera de Liga.

La racha la cortó el Celta en el siguiente encuentro ganando en la siguiente jornada en Balaídos al Levante por 4-3 con doblete de John Guidetti y tantos de Iago Aspas y Fabián Orellana. A diferencia de la actual temporada, Berizzo contó entonces con el goleador moañés en los tres partidos que el equipo celeste acumuló sin ver puerta.

Desde la lesión del internacional celeste en Barcelona -con la excepción de los 24 minutos que fue alineado en el Coliséum de Getafe- el promedio goleador del Celta ha descendido a la mitad. Con Iago Aspas en el campo el conjunto vigués anotaba una media de 1,6 tantos por encuentro; sin él en la ecuación el promedio goleador celeste ha descendido a 0,8 tantos por choque.

Llama poderosamente la atención la escasa aportación goleadora de los atacantes celestes desde la lesión de Aspas. Desde que falta el morracense la contribución de los delanteros se limita apenas a dos tantos de penalti (anotados por Maxi al Rayo Vallecano y Brais Méndez al Levante) y otro, en jugada, de Pione Sisto al Valladolid.

El dato refleja de modo fiel el grave problema de pegada que el cuadro vigués ha tenido sin su estrella durante los últimos dos meses y medio de competición, pero también las dificultades que el Celta ha tenido para generar juego en el área contraria. El equipo celeste no solo echa de menos los goles de su estrella, sino también su creatividad, desequilibrio y capacidad para activar ofensivamente al resto de sus compañeros de ataque.

Otro revelador dato complementa el anterior: siete de los ocho goles que el Celta ha marcado en los último diez partidos han llegado en acciones a balón parado, en su mayor parte faltas laterales y saques de esquina, además de las penas máximas anotadas por Maxi y Brais.

La aportación de los defensas y de la gente de medio campo ha sido en este caso importante. El defensa central mexicano Néstor Araújo lidera el gol en este periodo con tres dianas (al Rayo, el Valencia y el Valladolid), Okay Yokuslu ha conseguido otro (al Sevilla), mientras que el madrileño Fran Beltrán se estrenó como goleador con el equipo celeste ante el Athletic Club.

Salvo el tanto del centrocampista turco al Sevilla en Balaídos, ninguno de los demás goles anotados por el Celta en ausencia de Aspas ha servido al conjunto vigués para puntuar.