"Ganar y ganar", había repetido obsesivamente Antonio Mohamed en la previa. Aunque aprecia síntomas positivos en su equipo, ni oculta los defectos ni el empate le consuela. "El equipo tuvo la capacidad de ir a buscar el partido, con dos jugadas claras para poder ganarlo, las de Brais y Emre. Hicimos el esfuerzo. Pero nos sucede como ante el Mainz. El equipo juega 35 minutos muy bien y cuando baja la intensidad recibe el gol. El equipo se supo sobreponer a esa adversidad y acabó haciendo un buen partido, aunque todavía nos falta mucho para llegar a lo que queremos".

"Ese es el equipo, pero con mucha más terminación de jugada", sentencia sobre la versión del arranque. "Toda la recuperación rápida que hicimos, la intensidad? El rival no podía pasar de media cancha. Cuando Maxi y Iago estén en su potencial físico el equipo va a terminar muchas más jugadas".

"También sabíamos que en algún momento bajaríamos la intensidad", acepta. "Lo que más valoro es el resurgir en el segundo tiempo. El equipo logró el empate y sacó fuerzas para ir a buscar la victoria, aunque no la pudiésemos conseguir". La temperatura fue un factor de peso: "Vamos con mucha intensidad para arriba y hace mucho calor. Proponemos el partido en campo del rival y a veces dejamos muchos espacios. Es como nos sentimos identificados. Cuando mejoremos la condición y la manera de jugar, el equipo va a empezar a hacer goles y los recorridos van a ser diferentes".

No le duele especialmente el tanto recibido: "Creo que en el primer palo la desvía Maxi y eso provoca que el rival reciba. Es parte del juego. Tenemos que seguir mejorando ese aspecto y otros defensivos. En otros ya mejoramos. El gol nos golpeó anímicamente. No era justo. El equipo tuvo que remar desde atrás. En el segundo tiempo cambió el dibujo, quedamos más descubiertos. También se debe a que el equipo sintió el bajón físico".

"Es un fútbol muy competitivo. Todos los partidos tienen un alto grado de dificultad", analiza. "A nivel personal he realizado un sueño. A nivel laboral también. No descuidamos ningún detalle. Cualquiera puede marcar la diferencia. Eso lo tengo claro. A mí me dará también mucha experiencia conocer a los rivales después de la primera jornada. Vi a muchos el año pasado pero muchos cambiaron de entrenador y juegan diferente. Eso me da la posibilidad de seguir conociendo y aprendiendo. Mientras tanto estoy feliz de haber debutado en esta Liga y espero quedarme mucho tiempo".