El Celta, a petición del nuevo técnico, Antonio Mohamed, se plantea ahora fichar a un portero. La sucesión de lesiones sufridas en los últimos años por Rubén Blanco, que no ha conseguido disputar más de diez partidos consecutivos en Primera División, y la falta de experiencia de Iván Villar en la máxima categoría han propiciado que el club medite cambiar su hoja de ruta con respecto a la portería y sopese conceder a Mohamed la petición que sistemáticamente le negó a Eduardo Berizzo.

El nuevo entrenador celeste está decidido a reducir el elevado número de goles encajado en estos últimos años y una de las peticiones que ha cursado a los responsables del club ha sido la necesidad de reforzar la portería, la línea que Mohamed considera menos competitiva del plantel en relación a los clubes con los que el Celta se propone luchar el próximo curso por un puesto en Europa.

"Lo que nos hace falta yo lo tengo claro y la directiva ya lo sabe. Veremos qué hay en el mercado", manifestó el preparador el pasado miércoles en una entrevista con este diario. "Necesitamos un centrocampista, un defensa y veremos si podemos mejorar algún puesto más", señaló Mohamed en velada referencia a su petición de fichar a un guardameta. Ayer, en otra entrevista con el programa Galicia en Goles el técnico deslizaba que la lesión de Rubén le generaba dudas en la portería y no descartaba pedir al club el fichaje de un portero.

Por la tarde el técnico se reunió con la dirección deportiva para analizar la situación del mercado y se puso de nuevo sobre la mesa la necesidad de que el club cambiase de planes sobre la portería. El Celta se lo está pensando.

La apuesta por ocupar la portería de Balaídos con un guardameta de la casa ha sido una de las señas de identidad del equipo celeste desde la etapa de Luis Enrique Martínez y se ha prolongado durante los tres años al frente del banquillo de Eduardo Berizzo y la breve etapa de Juan Carlos Unzué.

Desde su segundo año en Balaídos, el Toto Berizzo insistió en la necesidad de contratar un portero de jerarquía que salvase puntos para equipo, algo que Rubén, aquejado de continuas lesiones, y Sergio, permanente cuestionado por un sector de la grada, no siempre lograron conseguir.

Pero para el Celta la portería nunca estuvo en discusión. El club renovó en enero pasado a Sergio por una temporada con otra opcional y en junio pasado anunció la ampliación contractual de Rubén hasta junio de 2023. Hasta ese año renovó también en enero pasado Iván Villar antes de cerrar su cesión al Levante. Cumplido el periodo de préstamo, el Celta ofreció al meta cangués la posibilidad de competir por un puesto con el catoirano y el mosense.

La idea inicial de la directiva era, por consiguiente, cubrir también este curso la portería con un guardameta formado en A Madroa, pero la enésima lesión de Rubén Blanco (un problema muscular en el muslo izquierdo que va a poner en peligro su participación en el primer partido de Liga) y la falta de experiencia de Villar han propiciado que el club reconsidere la petición de Mohamed de contratar un portero.

Tal posibilidad dibuja un escenario nuevo, pues el club no había hasta el momento sondeado el mercado en busca de un portero. De lanzarse a por él, la dirección deportiva tendría que delimitar qué perfil de guardameta le conviene más incorporar a filas, en qué circunstancias (compra o cesión) y por cuánto tiempo.

Y si finalmente se concreta su fichaje, habría que hacerle también sitio en el plantel, lo que necesariamente implicaría la salida cedido de alguno de los tres porteros de la casa. Iván Villar sería, sobre el papel, el que más posibilidades tendría marcharse a préstamo.

Al margen del nuevo escenario que se ha planteado en la portería, las ventas de Sergi y Jonny van a permitir a la dirección deportiva del Celta concentrarse en avanzar en la llegada del defensa y el centrocampista que también ha pedido Antonio Mohamed para cerrar el plantel. Tras desprenderse de la mayoría de los futbolistas declarados transferibles, quedan por resolverse las salidas de Fontás, con el que no se cuenta, y Radoja, a examen sin que se descarte su renovación, así como jugadores que difícilmente van a encontrar sitio en el equipo como Borja Fernández, Hjulsager o Juan Hernández.