Este despacho vigués llega acompañado de PGI-Engireering de Cataluña y Cartel Ingeniería, que han trabajado en la ampliación de la ciudad deportiva del Barcelona, el Mini Estadi, el estadio del Espanyol o la ampliación de una de las fases de la ciudad deportiva del Real Madrid. Conciben la ciudad deportiva como "un nido". Según sus autores el proyecto "está comprometido con la huella ecológica. Por su ubicación en la cima del paisaje gallego minimizar la huella significa concentrar lo más posible la edificación en vez de dispersarla". En la idea del proyecto se trabaja en dos referencias de cobijo: la más remota, el castro celta, y la más contemporánea, el Apple Campus 2 de Norman Foster. La forma de círculo la adopta el edificio central de la ciudad deportiva (donde se ubicarían muchos servicios que no son propiamente deportivos) y el pabellón deportivo. El estadio del filial tendría tres gradas.