El Celta Zorka no pudo dar la sorpresa en la final de la Copa Galicia ante el Uni Ferrol, y ahora centra toda su atención en el primer partido de Liga que disputará el sábado en Barcelona ante el Joventut.

El cuadro ferrolano tomó nota del susto que las viguesas le dieron el viernes en el memorial de Paco Araújo. El equipo entrenado por Lino López salió mucho más tensionado, aunque tuvo problemas en los primeros minutos de juego para abrir brecha. De hecho, a los cinco minutos las viguesas ganaban por un punto, aunque al final del cuarto estaba siete abajo.

La igualdad se mantuvo en el segundo cuarto, con un equipo ferrolano que no era capaz de abrir brecha en el marcador. El Celta Zorka había mejorado en defensa y ya no había tanta diferencia bajo los tableros, pero no lograba recortar las diferencias, que quedaban en los nueve puntos al descanso.

El descanso no le vino bien al equipo entrenado por Cristina Cantero, pues la tensión de las ferrolanas no tenía correspondencia en el equipo vigués. Con ello, el cuadro ferrolano abrió de forma definitiva el marcador. En los últimos diez minutos de juego, los dos entrenadores le dieron minutos a las jugadoras menos habituales dejando pasar los minutos.