Sentirá el Celta el aliento de los suyos en Riazor. Algo más de novecientos aficionados del conjunto vigués acudirán al estadio coruñés a animar a su equipo en un nuevo clásico del fútbol gallego.

El encuentro ha sido declarado de alto riesgo, aunque en los últimos enfrentamientos entre ambos equipos apenas se produjeron incidentes después de que desde diferentes sectores, empezando por los propios clubes, se hayan hecho muchos esfuerzos por normalizar las relaciones y disfrutar de un encuentro de rivalidad en absoluta calma.

El celtismo tiene ganas de derbi como lo demostró hace unas semanas cuando agotaron en una mañana las 880 entradas que el Deportivo había puesto a su disposición, el máximo prácticamente del que pueden disponer las aficiones visitantes en el estadio coruñés. La fecha, la hora y el hecho de disponer de desplazamiento gratis -ofrecía el Celta esta posibilidad a todos los interesados- animó a buena parte de la afición del Celta que hoy estará en Riazor.

El grueso de la expedición partirá hoy a mediodía desde el estadio de Balaídos. Tres autocares de diferentes peñas saldrán antes en dirección a Santiago donde tienen previsto comer -otra de las costumbres que empiezan a adornar estas jornadas- y esperar posteriormente a la caravana que sale desde Balaídos. La peña Comando sorprendía a la Plaza del Obradoiro antes de las 13:00h debidamente equipados para animar a su equipo

Desde la capital gallega todos juntos continuarán el viaje para llegar a A Coruña con tiempo suficiente para entrar en el estadio antes de que llegue el grueso de seguidores del conjunto deportivista.

El Celta saldrá antes que ellos. El equipo de Berizzo partirá a las 11:30 desde A Madroa y comerá en un hotel coruñés y descansarán ligeramente antes de desplazarse a Riazor en busca de un triunfo que ponga la rúbrica a una gran semana en la que se han vuelto a meter en unos cuartos de final de la Europa League dieciséis años después de su última experiencia entre los ocho mejores de un torneo continental.