Los futuros viñedos de albariño se forjan este verano

Con la intención de realizar en invierno la plantación de cepas propiamente dicha, en esta época del año las bodegas y los viticultores no solo preparan la vendimia de récord que comenzarán a finales de mes o principios de septiembre, sino que se ocupan de desmontes, explanación de parcelas, colocación de postes y demás tareas imprescindibles para hacer realidad futuros viñedos.

Se hace, sobre todo, en la comarca de O Salnés, la subzona más rica y productiva de la Denominación de Origen Rías Baixas.

Y, muy particularmente, en localidades como Vilagarcía, donde los viñedos no dejan de expandirse en los últimos años por lugares como Berdón, Castroagudín, Santa Mariña o Cornazo.

Lagar da Condesa

Claro ejemplo de ello es el proyecto de Lagar da Condesa, la bodega asentada en Caldas y perteneciente al Grupo Familia Gil que ha decidido apostar fuerte por Vilagarcía en su plan de expansión.

Una firma vinícola que ya monta sus nuevos viñedos en la ladera de monte Xiabre, concretamente en parcelas lindantes con Guillán, Berdón y Trabanca Badiña.

A la plantación hecha realidad el año pasado, ya dotada de cepas de albariño y situada en la cara noroeste del campo de fútbol de Berdón, como ya detalló FARO DE VIGO en ocasiones anteriores, se suma –como también se explicó en su momento– la creación de otra mucho mayor por la parte norte del terreno de juego, donde estos días se procede a enterrar los postes que formarán los nuevos viñedos.

Maquinaria pesada

Al mismo tiempo, la maquinaria pesada sigue trabajando en el desmonte y preparación del terreno de las parcelas anexas para, en próximos meses, seguir ampliando la viña proyectada por Lagar da Condesa, íntegramente destinada a la uva de variedad albariña.

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David Landín Roig, gerente de esta firma, no oculta su “satisfacción e ilusión” con semejante despliegue, convencido de que se trata de “una importante oportunidad” para Vilagarcía y su entorno, “en cuanto a desarrollo económico y generación de empleo”.

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En este sentido, en su momento ya dejó constancia de que “la política de empresa nos lleva a contratar gente de la zona en la que estamos asentados, y en el caso de la finca que estamos preparando en Vilagarcía estamos hablando de, al menos, tres personas fijas, a las que se sumarán los trabajadores eventuales que vamos a necesitar cada año, que pueden ser una decena para las tareas de poda y alrededor de sesenta en tiempos de vendimia”.

Valor añadido

Al igual que considera este proyecto un valor añadido para el sector vitivinícola en su conjunto, la Denominación de Origen Rías Baixas e incluso para el medio ambiente, ya que esta bodega despliega en sus plantaciones de Berdón un proyecto de economía circular que propicia la implementación de abonos naturales, obtenidos a partir del reciclaje y/o compostaje.

Esta bodega caldense que comercializa marcas como “O Fillo da Condesa”, “Lagar da Condesa” y “Kentia” es solo una más de las firmas con planes de expansión en marcha en Vilagarcía, convertida en clara alternativa a otros municipios arousanos ya saturados de viñedos en los que no es fácil –ni barato– encontrar terrenos aptos para ello.

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Entre las demás bodegas que se vuelcan con Vilagarcía puede citarse a Terras de Lantaño (Portas) y a la cooperativa vitivinícola cambadesa Martín Códax, ya que ambas han puesto en marcha ambiciosos proyectos con los que ampliar su producción en esta localidad.

Martín Códax y Viña Cartín

César Méndez, gerente de Terras de Lantaño-Viña Cartín, una bodega familiar con viñedos en Santa Mariña, Castroagudín, Vilanova, Meis y Portas, ya indicó hace meses al decano de la prensa nacional que la intención de su empresa es “seguir creciendo, como lo hicimos en los diez últimos años, cuando pasamos de 50.000 a 350.000 litros de albariño de la máxima calidad”.

Crecimiento que, en palabras de Juan Vázquez, en calidad de presidente de la cooperativa cambadesa Martín Códax, “es buen ejemplo de que los viticultores, cada vez más profesionalizados, confían en el proyecto de la bodega y en el futuro de nuestro sector, de ahí que se afronten nuevas y esperanzadoras etapas, como la de Vilagarcía”.

Algo que se hace extensivo a otros municipios, pues cabe recordar que Pontecesures, Catoira y Valga también están en el punto de mira de diversos bodegueros y viticultores que han empezado a adquirir terrenos para plantar albariño.

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