El puente festivo de San José –el lunes es festivo en Madrid– hace que muchos ciudadanos de la capital de España decidieran pasar este largo fin de semana en las Rías Baixas.
También en O Grove, donde algunos tienen residencia, sobre todo en A Toxa y el entorno de Pedras Negras. Se toparon a su llegada con restaurantes recién abiertos al público después del parón invernal y, sobre todo, con un puñado de “locos” disfrazados tomando tapas sin parar y divirtiéndose de lo lindo: los participantes en Pinchanogrove. La villa vive así, gracias a su cocina, una especie de ensayo general para Semana Santa.
A la ruta concurso “Pinchanogrove” todavía le queda una semana de recorrido, por lo que, prácticamente, va a introducir al municipio en el mes de abril y, con ello, lo situará a las puertas de Semana Santa.
Lo hará después de unas exitosas jornadas centradas en la cocina, que de este modo vuelve a dejar patente que es una de las grandes bazas turísticas de la península meca.
Reaperturas sonadas
De ahí la importancia de que retomen a la actividad establecimientos como Marisquerías Solaina, Pan de Millo y otros negocios que abrieron sus puertas en los últimos días, una vez superado el descanso invernal.
Establecimientos para los que fue como llegar y besar el santo, ya que fue abrir sus puertas y volver a registrar una notable afluencia de clientes, de ahí que en estos casos sus propietarios y cocineros pronostiquen una brillante Semana Santa.
Lo hace, por ejemplo, Lorena Moldes, la propietaria y chef del Pan de Millo, considerada una de las cocineras más importantes del municipio.
Álvarez Guillán
A la altura de “grandes pioneros de la buena cocina meca como los que regentaron Casa Pepe, El Combatiente, el restaurante Finisterre, el Crisol y tantos otros negocios de altura que forman parte de nuestra historia”, explica Carlos Álvarez Guillán, expresidente de la patronal grovense.
El mismo que habla de Lorena Moldes como una joven “con las ideas muy claras, trabajadora incansable, luchadora empedernida y un buen ejemplo de esa nueva hornada de jóvenes emprendedores que representan con maestría la popular cocina meca; tanto la más tradicional como la más vanguardista”.
Una cocina que saborean este finde muchos madrileños que han aprovechado el puente festivo de San José para desplazarse a O Grove y disfrutar de su cocina.
De pincho en pincho
Como también la disfrutan los grovenses y arousanos en general que se han acercado tanto a los restaurantes antes aludidos como a los bares y taperías implicados en el “Pinchanogrove”, donde este mediodía se celebró la tradicional carrera de pinchos, con participación de una treintena de personas disfrazadas para la ocasión.
Una cita con las tapas, cabe recordar, que tiene como protagonistas a los restaurantes o taperías O 48 da Platería, O Trasno, Casa Abel, Misturas, Afuego, Metropol, O Portiño y Gula, donde se ofrecen los pinchos a 2,50 euros la unidad.
Por cierto, que a “Pinchanogrove” todavía le quedan citas por delante, como la cata de aguardientes que se anuncia para el sábado en el Metropol o la fiesta infantil de despedida de la actividad, a celebrar el domingo desde las 12.30 horas, con el animador local Javi Solla como conductor de la misma.