Se estrecha el cerco a las autocaravanas en la costa meca

Mucho se ha hablado en los últimos años de la presión que ejercen las autocaravanas en zonas medioambientalmente protegidas de O Grove. Y más que se habló desde que se levantó el estado de alarma declarado a causa de la pandemia, ya que en ese momento este tipo de turismo parece haberse multiplicado.

Ahora parece que el Concello mueve ficha, tratando de proteger espacios naturales y enclaves paradisíacos como la costa de Con Negro.

El objetivo es evitar que los caravanistas pasen la noche en cualquier espacio público de la península meca, prestando especial atención a los que destacan por sus valores medioambientales.

Se trata, en síntesis, de hacer cumplir la ordenanza municipal existente e invitar a quienes practican este tipo de turismo a estacionar en los lugares o establecimientos indicados para ello, aprovechando el hecho de que O Grove dispone de una buena cantidad de negocios que reúnen las condiciones idóneas.

Dicho de otro modo, que se quiere evitar que las autocaravanas estacionen, a veces durante días, casi sobre la playa o el cordón dunar de O Carreiro, Con Negro, Area da Cruz y tantos otros puntos del municipio, especialmente en la costa de San Vicente. Al igual que lo hacen en el puerto de O Corgo, en A Toxa y otros lugares.

Para evitarlo se adoptaron acciones como la instalación de señales que prohiben estacionar en horario nocturno en el entorno de Con Negro. Más concretamente, desde las 23.00 horas hasta las ocho de la mañana del día siguiente.

Algunos hosteleros mecos aplauden esta decisión y muestran sus deseos de que la misma tenga continuidad, tanto aplicándola en otros lugares del municipio como adoptando otras medidas en la misma dirección, desde hace mucho tiempo reclamadas por la asociación Empresarios Grovenses de Bens e Servicios (Emgrobes).

Mayor control policial

Del mismo modo, reclaman al Concello “que todo esto no quede en una simple colocación de señales”, advirtiendo de que “hay que hacer que sean respetadas”.

Por eso reclaman “una mayor presencia policial en los tramos de costa más conflictivos, en los que suelen amontonarse las autocaravanas sin control”.

Hay, incluso, quien reclama que se adapte la ordenanza “para fijar sanciones más duras, ya que no puede ser que a algunos les salga más barato pagar una multa que una plaza en un camping, ya que si sucede esto van a seguir estacionando donde les de la gana”.

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