Cuando estaban a punto de iniciar la recolección de la uva en sus parras, varios viticultores de la comarca pudieron comprobar en los últimos días que sus parcelas han sido saboteadas.

Parece que alguien se dedicó a cortar decenas de cepas, sobre todo de albariño, arruinando así la producción de este año y los venideros en las viñas afectadas. El mayor número de fincas atacadas se encuentra en lugares como As Quintáns, en la parroquia cambadesa de Castrelo. En algunos casos puede hablarse de una situación ruinosa para los productores, a tenor de la gran cantidad de plantas que han perdido con motivo de estos ataques.