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Cambados inicia los muestreos de vieira tras verse frustrada la campaña navideña

La primera analítica fue favorable, pero falta una segunda y que la Xunta de Galicia remita la autorización -En diciembre no se pescó por el reducido tamaño del marisco

Cambados inicia los muestreos de vieira tras verse frustrada la campaña navideña

La cofradía de Cambados y la empresa Porto de Cambados tuvieron que hacer de tripas corazón en noviembre pasado, cuando el mercado se moría de ganas de comprar vieiras de la ría de Arousa, y ellos decidieron que no las pescarían hasta después de Navidad. Una decisión difícil, pero que consideraron la más sensata, viendo que había muy pocas piezas de tamaño comercial.

Un par de meses después, ese marisco ha crecido, y la intención del pósito y de la empresa comercializadora es iniciar la campaña de extracción cuanto antes. Por ello, está previsto que a lo largo de esta semana se lleve a cabo un segundo muestreo, para conocer el estado de la toxina amnésica (ASP), que en esta época del año suele ser lo bastante baja como para permitir la extracción del recurso, al menos en algunas zonas de la ría. En días pasados ya se hizo una primera analítica, y el resultado fue favorable. Esto implica que si el segundo también da bien, los barcos podrían salir a pescar en cuanto recibiesen el visto bueno de la Consellería de Pesca.

El mejor momento para pescar vieira es en Navidad, cuando la hostelería y las empresas de productos "gourmet" la venden más, y en esa época gran cantidad de la misma se despacha fresca. Finalizadas las fiestas, la mayor parte de la producción será para almacenar marisco para el verano, y para servir a algunas empresas que la guardan congelada. Además, y siempre y cuando haya suficiente, la empresa aprovechará para dejar en reserva una cantidad para la fiesta de exaltación de la vieira, que se celebra en Cambados a mediados de julio.

Si el segundo muestreo de toxinas es favorable, la flota podría iniciar la campaña en un margen máximo de dos semanas, lo que también supondría para la flota la posibilidad de diversificar las especies a las que se dedican, más teniendo en cuenta que el centollo escasea. No obstante, todavía faltan algunos flecos por zanjar, como el precio que cobrarán los armadores por el kilo de vieira o los topes de captura por barco y día.

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