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La Policía sorprende a los conductores con un control de alcohol en Rosalía de Castro

No es habitual que los agentes municipales organicen este dispositivo a plena luz del día y entre semana - Esta acción se enmarca en la campaña de la DGT que finaliza el domingo

La Policía Local de Vilagarcía realizó ayer un control junto al parque de la playa Compostela. // Noé Parga

Los conductores que ayer por la mañana entraron a Vilagarcía por la avenida Rosalía de Castro -el principal acceso norte a la ciudad- se encontraron con un inusual despliegue policial a la altura del parque de la playa Compostela. Cuatro agentes de la Policía Local daban el alto a algunos vehículos para proceder a un control de alcoholemia y comprobar la vigencia de los permisos de conducir debido al creciente número de conductores que continúan circulando por las carreteras pese a tener el permiso retirado, precisan fuentes policiales.

Desde el Concello de Vilagarcía apuntan que este control de la Policía Local se enmarca en la campaña de la Dirección General de Tráfico (DGT) que se está desarrollando a nivel nacional y que lleva por título "Campaña especial sobre el control de la tasa de alcoholemia y presencia de drogas en conductores". Los controles se realizan entre el 5 y el 11 de junio, por tanto terminan el domingo.

Y es que no resulta para nada habitual que los agentes de la Policía vilagarciana realicen controles de alcohol entre semana y a plena luz del día, por lo que el dispositivo desplegado ayer por la mañana en la entrada a la ciudad por Rosalía de Castro -por Carril- sorprendió a más de un conductor.

Zona azul

Lo que sí se ha convertido en rutinaria es la vigilancia de los aparcamientos de la zona azul y de las zonas reservadas para carga y descarga, sobre todo desde la incorporación de los auxiliares, contratados este año ya desde la primavera para reforzar a la mermada plantilla policial.

Durante varios meses los funcionarios de la Policía Local, en pie de guerra con el gobierno local al considerar que desoía sus demandas, suavizaron el control sobre los estacionamientos públicos con algún tipo de restricción horaria.

Una situación que cambió sustancialmente con la llegada de los "aprendices", pues se incrementó la presión sobre la zona azul. Ayer mismo dos policías locales -titulares- estuvieron poniendo multas en las plazas del entorno del mercado de abastos.

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