Ahora sí, parece que el verano llega, y para quedarse. El calor acompañará a la comarca de Arousa durante los próximos días, con temperaturas que superarán los 30 grados, y los hoteles se preparan para la temporada de verano. Aunque las reservas para julio y agosto todavía son muy escasas (de un 20% en algunos casos), los establecimientos confían en la última hora para lograr una ocupación aceptable, pues cada vez los clientes formalizan la reserva con menos antelación (incluso dos o tres días antes de la fecha). Lo han comprobado a lo largo de estos cinco meses de 2014, que para varios de los alojamientos consultados han sido mejores que en el mismo periodo del año pasado. Ante esta situación, el sector se muestra optimista y espera que la tendencia continúe.

No obstante, todo dependerá de las condiciones meteorológicas. "Si hace buen tiempo nos irá bien", comenta la directora del Hotel Carril, Sandra Lede. Y es que el calor y la ausencia de lluvias en una zona de costa como Arousa, resultan determinantes para que los hoteles tengan una buena o nefasta temporada.

Algunos establecimientos de la comarca se adelantan a la época fuerte de verano ya este fin de semana, cuando varios de ellos estarán llenos gracias a la celebración en Vilagarcía del torneo Arousa Fútbol-7 y en Cambados del campeonato de España infantil de baloncesto. Lo saben bien en el Castelao y en el Pazo Rial, con sus 150 y 140 plazas respectivamente (son cifras aproximadas) cubiertas. "A finales de mes también estamos llenos con la competición Cidade de Vilagarcía", apunta la secretaria de Ahituvi y gerente de dos hoteles de Vilagarcía, Raquel Mondragón.

Para Casa Rosita, en Cambados, los eventos deportivos también suponen un balón de oxígeno. Su propietario, José Ramón Montero, apuesta porque se organicen más actividades de este tipo en la comarca, que ayudan a la economía de la misma. "La ocupación del hotel va regular; estamos mejor en banquetes. No obstante, este fin de semana tenemos dos equipos de baloncesto alojados, y estos eventos deportivos también mueven a mucha gente que viene a comer aquí", destacan desde Casa Rosita.

Tanto el Hotel Carril como la Asociación de Hostelería de O Grove aprecian una leve mejoría de ocupación en lo que va de año con respecto al anterior ejercicio. "Los puentes fueron bastante buenos. El de mayo tuvimos un 48% y en Semana Santa un 70%", expresa la presidenta de los hosteleros grovenses, Beatriz Castro, quien coincide con otros profesionales del sector en que la meteorología resulta clave en su gremio: "Hemos notado una mejoría desde que terminaron los temporales", dice.

Otra forma de alojamiento en las vacaciones de verano es alquilando un piso, una opción por la que se decantan mayoritariamente familias que suelen veranear en el mismo lugar. Desde Xeira Inmobiliaria, Miguel Tourón observa que el arrendamiento de temporada va aguantando el tipo, en parte gracias a que los precios se mantienen congelados y a que -admite- las familias que veraneaban en Arousa lo siguen haciendo. "En julio el mes oscila entre 1.000 y 1.100 euros, y en agosto entre 1.200 y 1.300. Las quincenas están en unos 600 euros", apunta la gerente de Laybe, Mariely Méndez Galiñanes, quien, a diferencia de Tourón, no aprecia ninguna mejoría en los alquileres.