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El "Gato Negro" elimina las filtraciones de agua en su sede de Carril tras una década

La asociación empezó las obras después de Carnaval y prevé terminarlas a finales de este mes, cuando ampliará la oferta de actividades - Los trabajos se ejecutan en el pabellón

El "Gato Negro" elimina las filtraciones de agua en su sede de Carril tras una década

La asociación Gato Negro de Carril (Vilagarcía) está en obras. Con una subvención de la Diputación de Pontevedra la entidad carrilexa pudo iniciar después de Carnaval unos trabajos que pondrán fin a las importantes humedades y filtraciones de agua que sufre la sede -donde se realizan todas las actividades- desde su apertura en diciembre de 2001, en la antigua casa consistorial.

La reforma se concentra en el pabellón. El año pasado la entidad pintó y aisló una de las paredes, que simplemente estaba formada por bloques de hormigón, por lo que había mucha humedad. Debido a la imposibilidad económica de sufragar la remodelación de todo el pabellón a la vez, ahora se está ejecutando una segunda fase que mejorará otra pared, el escenario y parte de la fachada del inmueble, por donde entra agua los días de lluvia, afectando incluso a la sala de partidas, en la planta baja. El cuarto de música, donde ensaya la rondalla, también será objeto de actuación con la reparación de la pared exterior y la colocación de un armario para guardar los instrumentos.

"Hace un mes tuvimos que cerrar los baños -situados bajo el escenario- porque estaban inundados", expresa el vicepresidente de Gato Negro, José Eiras, quien reconoce que la lluvia bajaba "a chorro" por las paredes, tanto por el escenario, como por una lateral y la frontal -la que da a Rosalía de Castro-. En cuanto a la instalación eléctrica, contará con más enchufes.

Aunque se prevé que estas obras solucionen el principal problema del edificio, quedarán pequeñas mejoras sin efectuar. "Tenemos que ir haciendo las cosas poco a poco. Para el año tenemos pensado instalar un telón con motor y pintar el escenario", comenta el directivo de la asociación.

Debido a las humedades y filtraciones, el pabellón del Gato Negro es un recinto muy frío, sobre todo en invierno. Aparte del aislamiento que se está ejecutando, y que se prevé finalizar el 31 de marzo, el colectivo ya instaló en algunas salas aparatos de aire acondicionado con opción de calor y frío, aptos tanto para invierno como para verano.

La intención de la directiva es ampliar la oferta de actividades con capoeira y bailes de salón cuando concluyan las obras, las cuales no han paralizado los cursos que se realizan. Solamente han afectado a patinaje, que se traslada al local antiguo provisionalmente.

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