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Los 7 magníficos de la flota

Espectacular vista de piezas de pez espada. Abajo, "encaixando" ejemplares de bacalao.

Se trata de un ranking elaborado en base al tamaño medio de las especies (aquí están los más grandes) así como su grado de identificación histórica con la lonja de Vigo, al que hemos añadido el fletán negro, de explotación reciente, cuya pesca corre a cargo de la flota viguesa de Gran Altura, y cuyos volúmenes de captura no se reflejan en el top-20 porque, aunque también es usual en O Berbés, el mayor volumen de sus capturas es descargado en puertos de sus países de origen, y todavía no ha alcanzado alto grado de penetración en el mercado español.

Pez espada, el gran emperador

Es seguramente la especie estelar de la lonja viguesa, donde el año pasado se comercializaron más de un millón de kilos del también denominado "gladiador" o "emperador". Alcanzan un tamaño máximo de 4,3 metros y un peso de 540 kilogramos. Los ejemplares que llegan a Vigo proceden de los caladeros del Atlántico Norte y Sur, así como del de los Océanos Índico y Pacífico. Su método de pesca más tradicional es el palangre. Predador nato, tiene como enemigo al marrajo.

Marrajo

Compite en los mares y en el mercado con el pez espada. En este último caso, por el parecido entre sus carnes. El marrajo es uno de los grandes escualos, pues puede medir hasta cuatro metros y medio, aunque el tamaño usual de los ejemplares adultos bien desarrollados sueles estar entre los 3,5 y los 4 metros de longitud, siendo su peso de hasta 750 kilogramos. Cazador de todo tipo de presas, destaca por su velocidad (puede alcanzar los 124 kms. hora), producto de su perfecta hidrodinámica, su potente masa muscular y su aleta caudal.Es pariente cercano del tiburón blanco y, junto a la tintoreta, uno de los principales objetivo de la flota tiburonera gallega.

Bacalao, un emigrante histórico

Desde antes de mediados del siglo pasado, la flota de altura gallega ha estado estrechamente vinculada a la pesca de bacalao, una especie de tamaño muy diversificado pues, aunque el de la mayoría de las piezas suele ser pequeño (entre 80 cms. y 1,80 m.),en muchos casos puede alcanzar hasta los dos metros de longitud. Y es que dentro de lo que conocemos como bacalao, hay diferentes razas. Los grupos más importantes están constituidos por peces emigrantes oceánicos, los cuales emprenden largos periplos para reproducirse y alimentarse. Las razas más importantes para la industria son las del Mar de Barents y las de Islandia, así como poblaciones de Groenlandia y Terranova. Las formas del Mar del Norte y del Báltico constituyen tan solo el 10% de la población total de bacalaos. Junto a las grandes poblaciones de bacalaos emigrantes se encuentran razas locales sedentarias que permanecen junto a la costa o en los fiordos.

Fletán negro, el más nuevo en plaza

Desde finales de los años 90 la captura de fletán negro se ha convertido en uno de los principales objetivos de la flota gallega de Gran Altura. Hasta entonces, no figuraba entre las especies capturadas por nuestros buques. Su cuota de capturas en la lonja gallega no figura entre las veinte primeras pero la principal razón de ello radica en que se trata de una especie que todavía no ha alcanzado una gran comercialidad en el mercado español, aunque su carne es cada vez más apreciada. También conocido como halibut, este pez habita en las aguas del Atlántico noroccidental y oriental, desde el golfo de Vizcaya hasta el mar Blanco, pasando por el mar del Norte, situándose a una profundidad muy variable que va desde los 100 a los 2.000 metros. Puede llegar a medir 4 metros y pesar hasta 400 kilos.

Atún rojo, de sangre caliente

Pariente muy cercano del bonito, también recibe la denominación de atún azul o cimarrón. Es originario de ambas orillas del Atlántico, tanto la oriental como la occidental, y también del mar Mediterráneo. Su tamaño puede alcanzar más de 3 metros y superar los 500 kilos y sus técnicas de captura suelen ser las del cerco y palangre. Animal de sangre caliente, algo muy raro entre los peces, su hábitat preferido son tanto las frías aguas de las costas de Terranova e Islandia, como en las aguas tropicales del Golfo de México y el mar Mediterráneo, donde todos los años desova. El año pasado se descargaron en la lonja viguesa 215.000 kilogramos de esta especie.

Merluza, princesa de los mares

Vive a ambos lados del Atlantico y en Pacífico, frente a las costas de Estados Unidos, México, Chile y Nueva Zelanda, si bien la europea, que alcanza los 1,2 metros de largo, es la más apreciada en el mercado.Habita en fondos fangosos, a profundidades de 30 a 1.000 metros, aunque lo más común es que se encuentren a una profundidad de entre 70 y 340 metros. Entre las múltiples variedades comercializads se encuentran la ya citada merluza europea, la merluza plateada o de Boston (la más pequeña), la merluza del Pacífico (costas de Baja California, entre México y estaos Unidos), la pescada (Chile), la merluza austral (Nueva Zelanda), la merluza de El Cabo (Suráfrica y Namibia), merluza argentina y merluza negra (Senegal).

Rape, un diablo prehistórico

Su feroz aspecto -también le llaman diablo negro del mar- delata que es una criatura que data de tiempos inmemoriales. Se le sitúa en el Eoceno Medio, durante el Terciario inferior. Su característica más llamativa es la cabeza, ancha y aplastada, y posee unos dientes bien desarrollados, con la mandíbula inferior y los lados de la cabeza flanqueados por pequeños alerones o lengüetas. Su longitud habitual oscila entre los 1,2 y los 2 metros. Sobre la boca llevan una estructura movible en forma de caña de pescar, que ondea como una bandera simulando una pequeña presa. Los aparejos más utilizados para la captura de rape son el arrastre, el palangre y el trasmallo.

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