"Yo sería la persona más feliz del mundo si dejase de haber corridas de toros en Pontevedra, que además no aportan nada a la fiestas; lo único que aportan es un problema", declaró ayer la teniente de alcalde Carme da Silva, al valorar la manifestación antitaurina que el pasado sábado reunió a más de mil personas en Pontevedra. "Yo felicito a toda la gente que participó en esa manifestación", llegó a afirmar la edil, antes de negar una vez más que el Concello de Pontevedra subvencione a la empresa taurina que gestiona la plaza de toros de San Roque. La aportación municipal de casi 40.000 euros al año es "un contrato de arrendamiento de un edificio", insistió la portavoz del gobierno del BNG, quien además explicó que este contrato es "claramente rentable" para el ayuntamiento.

Respecto a la petición de los colectivos antitaurinos al gobierno local de Pontevedra, para que deje de financiar de forma alguna los espectáculos taurinos en la ciudad, la edil insistió en que "el gobierno local es antitaurino, el BNG es antitaurino, nunca apoyamos los toros", tras lo que animó a todos los opositores a esta actividad a que "insten a las administraciones que sí tienen competencias para eliminar las corridas de toros en el Estado español, a hacerlo", porque, reiteró, "el Concello de Pontevedra no tiene ninguna competencia para eliminarlas".

Aseguró además que fue este gobierno municipal el que "eliminó" las subvenciones a los toros en Pontevedra.

El pasado mes, el gobierno local firmó con la empresa de los hermanos Lozano este "contrato de alquiler" de la plaza de toros, para albergar actividades municipales durante los próximos doce meses. El importe del acuerdo para este año es de 38.500 euros, 2.500 menos que en el convenio anterior. Mediante este convenio, el Concello puede celebrar en la plaza de toros el torneo medieval de la Feira Franca, a principios de septiembre.

En medio de numerosas demandas de los grupos animalistas y abolicionistas, con el apoyo expreso de Marea Pontevedra, para que se anule ese contrato por entender que no es más que una subvención encubierta a los festejos taurinos, el asunto fue debatido unos días antes de la firma del nuevo acuerdo en el consello de la Feira Franca, que agrupa a los nueve colectivos que se implican en la organización de esta recreación histórica. Todos ellos "dieron su respaldo unánime" a la firma del contrato y al uso de la plaza de toros para ese torneo medieval, según explicó en su día la concejala, a modo de justificación de la renovación. Carme da Silva aseguró entonces que no es posible encontrar una instalación mejor por ese precio. Por eso el Concello de Pontevedra sigue pagando una cantidad anual a la empresa que organiza la feria taurina de A Peregrina.

Carme da Silva animó a los grupos políticos que se declaran antitaurinos "a que lo sean también en Toledo, en Andalucía, en todas partes, no solo aquí en Pontevedra".