La Asociación Pola Defensa da Ría (APDR) exige una "solución definitiva" al tratamiento de los vertidos de la ría. Una demanda que reitera tras conocerse la denuncia de la Unión Europea a España por el "indudable riesgo a la salud pública", tal y como se recogía en el comunicado de Bruselas, que están provocando esta situación.

El colectivo considera que la medida adoptada desde instancias comunitarias "tiene mucho que ver con la denuncia interpuesta por la APDR que hacía referencia a los vertidos de las aguas residuales urbanas en una zona sensible como es la Ría de Pontevedra". En todo caso, sus responsables llaman la atención sobre el origen de estos vertidos. "No son solo las aguas domésticas, sino también las industriales, lo que incluye evidentemente los vertidos de Ence", añaden. Cuantifican en 40.000 metros cúbicos al día el volumen de agua que la empresa vierte a la ría.

"Debemos indicar también que, a pesar de haber solicitado datos al respecto en numerosas ocasiones, desconocemos los parámetros de vertido de la depuradora de Placeres; sabemos, eso sí, que parece tener problemas con niveles de nitrógeno y fósforo y que está funcionando de forma correcto en lo que a depuración bacteriana se refiere", exponen en la asociación. A continuación, se agrega: "Sabemos que el emisario submarino ha dejado de realizar correctamente su función, puesto que desde hace algún tiempo está partido y ha quedado inutilizada la parte que corresponde a los difusores, justo la que tiene alguna función en el proceso del tratamiento de las aguas de vertido".