Las medidas económicas que implican una mayor repercusión sobre las economías familiares se reciben en Poio con una rotunda oposición que se evidencia en la unión de ocho asociaciones vecinales. Los representantes de los colectivos escenifican el malestar que hay en la calle mediante un documento firmado y entregado en el Concello. En éste denuncian el "mazazo" que implican las nuevas tasas y exigen que se abran a debate.

"Una vez más la decisión de incrementar los impuestos no cuenta con la información previa y necesaria con la que deben contar los vecinos", lamentan, agregando que la aprobación choca con lo que se espera de "un gobierno municipal que se define democrático y abierto a la ciudadanía". Así lo recogen en su escrito los responsables de los colectivos vecinales de Raxó, Combarro, San Martiño, Lourido, San Salvador, O Pereiro, O Muíño y Samieira en el la protesta que se llevó a las dependencias consistoriales.

Tras la reunión que mantuvieron esta semana en Raxó, llegan a calificar de "tomadura de pelo" los incrementos aprobados. Las alzas son de un 2,77 por ciento en el abastecimiento; 4,77 en el saneamiento y 3,70 en la recogida de basura, misma proporción en la que se encarece la tasa de vertido e inspección de aguas. "El Concello de Poio no dispone en su totalidad del saneamiento integral; de hecho la mitad de Samieira y Raxó, no cuentan con depuración de residuales", cuestionan sobre algunos de estos encarecimientos. Agregan, además, que no son estos los únicos servicios "deficientes". De hecho se quejan de cómo funciona la recogida de basura, cuya factura anual para cada domicilio asciende a 108 euros y sitúa entre las más caras de la provincia: "La ubicación y mantenimiento de muchos contenedores es defectuosa; pero incluso si se solventasen estos problemas las nuevas tasas seguirían siendo un auténtico despropósito".

El evidente enfado va a más en la carta que dirigen a Luciano Sobral y el resto del gobierno local. De modo que se acusa a los responsables municipales de cargar sobre el bolsillo de los vecinos los errores del pasado. "El incremento de las tasas supone un auténtico mazazo a las economías de los contribuyentes y lo único que justifica es la falta de control del gasto de dinero público, así como la carencia de un programa económico adaptado a los tiempos que corren", exponen.