Los vecinos de Postemirón denuncian el peligro que viven sus casas debido a la gran acumulación de tierra de los vertidos que la empresa encargada de las obras del AVE, Ute Ave Vilaboa-Pontevedra, está realizando en el monte de Figueirido. La altura que han llegado a alcanzar los vertidos de tierra hace que los habitantes de esta localidad teman por su seguridad en el caso de un posible corrimiento de tierra, algo que no sería extraño debido a las condiciones de la zona y a la lluvia invernal.

"O que pedimos é que se garanta a seguridade dos veciños", afirmó el presidente de la agrupación vecinal, David Suárez, quien reclamó la implicación de los responsables de las obras (Concello de Vilaboa, Diputación y Comunidad de Montes de Figueirido) "para protexer as casas dos veciños cercanas aos vertidos". Suárez también quiso señalar que, a pesar de que la asociación de vecinos reconoce que la parcela de terreno que está recibiendo los residuos es propiedad de la Comunidad de Montes de Figueirido, son los vecinos de Postemirón los que se ven afectados por el desarrollo de las obras y los que padecen los posibles riesgos que se puedan derivar de la mala gestión de los residuos.

Asimismo, los habitantes del lugar se han mostrado muy preocupados por las condiciones de la concurrida carretera que pasa por Postemirón. Diariamente, el vial registra una alta afluencia de tráfico no sólo como acceso para los vecinos del lugar, sino también por los vehículos que se dirigen al Lago Castiñeiras y los soldados que, desde la Brilat, se encaminan a Vigo, O Morrazo o Marín. Sin embargo, el asfalto se encuentra en muy malas condiciones, afectado por el paso de los camiones de gran tonelaje encargados de transportar los residuos al monte.

Por otra parte, ayer por la tarde el presidente de la Comunidad de Montes de Figueirido, acompañado por un miembro de Ute Ave, se acercaron hasta el lugar para valorar su estado. "Aseguran que todo ía quedar ben", comenta David Suárez, "pero isto ten que parar", subraya.