La emigración gallega se ha cobrado una nueva víctima en México. Daniel Balboa Morrazo, de 40 años, soltero y sin hijos, fue hallado muerto en su coche en el estado de Guadalajara el pasado domingo 4 de marzo. Tanto el cuerpo como el vehículo estaban carbonizados, por lo que se ha abierto una investigación para esclarecer lo sucedido. El hermano de la víctima, residente en Venezuela con su madre, tuvo que desplazarse al lugar para identificar el cuerpo y hacerse cargo de los restos mortales.

Poco ha trascendido sobre las circunstancias de la muerte de Daniel Balboa que, según relata la única pariente que tiene en Galicia, una tía de avanzada edad que reside sola en la localidad ourensana de Beariz.

"No sabemos qué le pasó a Daniel, solo que lo mataron y que lo metieron en el coche y lo quemaron", explica Sara Balboa, hermana del padre de Daniel y propietaria de la casa de Beariz en la que la familia solía veranear antes del fallecimiento del progenitor, su hermano Eduardo Balboa. "Yo me enteré por un primo que vive en Guadalajara que me llamó para decirme que mataran a Daniel y que no localizaban a su madre", relata Sara. Fue otra sobrina, que reside en Madrid, la que les facilitó el contacto.

Desde que murió el padre de Daniel la familia no volvió a Ourense. Cuando venían, "aunque tenían un piso en Vigo, pasaban mucho tiempo aquí, a mi hermano le gustaba mucho esto", asegura Sara, que guarda fotos del fallecido cuando era niño y de la familia al completo con el abuelo.

Daniel Balboa y su hermano Eduardo son hijos de emigrantes gallegos que nunca olvidaron sus raíces. El padre, originario de Beariz, y su madre, Isolina Morrazo, de Cambados, hicieron vida en Venezuela, donde nacieron los dos niños. Sara Balboa lloraba ayer la pérdida de su sobrino y lamentaba el dolor de su cuñada, que vive en Caracas. "Tardaron varios días en localizarla porque se mudó a vivir con la familia de su otro hijo y no daban con ella", relata. Finalmente ha sido el hermano Eduardo el que se ha desplazado a Guadalajara para identificar el cuerpo, por el que se ofició un funeral en esa localidad el pasado jueves.

Sara Balboa cuenta que Daniel se crió y estudió en Venezuela, pero que hace unos años decidió dejar el país. "Ya sabe como está eso, y a él no le gustaba Caracas, así que se fue con los primos a México". Pero el final ha sido triste para él, llora Sara, "México da dinero, pero también disgustos; a mi sobrino lo mataron personas sin alma ni conciencia".