El excesivo ruido, por encima del nivel de decibelios permitido, no es patrimonio exclusivo de las zonas del centro urbano y de las calles del casco viejo en las que se ubican los locales de movida nocturna, sino que en la lista de zonas con mayor contaminación acústica del municipio, que maneja el Concello de Ourense, están vías como la calle Progreso, la Avenida de Portugal e incluso aquellas que están próximas al trazado ferroviario.

La ciudad de Ourense carece de Mapa Estratégico de Ruidos. Está exenta de esa obligación que viene impuesta por la directiva 2002/49/CE sobre la evaluación de la gestión de ruido ambiental para ciudades de más de 250.000 habitantes. El Concello no tiene por tanto la obligación, en una ciudad de 108.000 habitantes, de elaborar un mapa de ruido, pero realizan un seguimiento de las zonas más conflictivas a nivel de contaminación acústica, con sistemas de medición de ruidos que, según fuentes del gobierno local, incluyen medidores situados en puntos estratégicos del casco vello.

Así hay controles específicos de ruidos en Plaza do Corregidor, As Mercedes, por ubicarse allí locales de movida nocturna abiertos hasta la madrugada, así como en Pena Corneira, otro punto sensible a la contaminación acústica, calle Pizarro calle Gravinia, en las que existen sistema de medición de ruido, según el Concello.

Según fuentes del Concello es el punto de la ciudad más sensible a los ruidos, sobre todo los fines de semana, en los que se pueden superan los 70 decibelios permitidos

Sin embargo esas mediciones de saturación de ruidos en otras zonas ajenas a la movida, y de ruido más bien diurno como el eje transversal de la calle del Paseo, antigua carretera de Vigo, en su prolongación por la antigua carretera de Vigo y por la carretera de Vilamarín en dirección al barrio de A Ponte.

También se incorpora como zona saturada el antiguo trazado del ferrocarril a su paso por la ciudad, suspceptible de ser modificado en algunos de los puntos próximos a vivienda, el nivel del ruido se eleva por encima de lo permitido, algo que el Concello espera pueda superarse con la llegada de la alta velocidad. Los vecinos no suelen presentar quejas ante la Policía Local o en el Concello porque el ruido está adscrito al horario diurno no al de descanso

Las protestas parten casi siempre de vecinos y asociaciones vecinales de la zona centro, especialmente del Parque de San Lázaro, Valle Inclán y As Mercedes, y del casco vello por aglutinar ahí buena parte de los locales de ocio nocturno de la ciudad.

Los estudios de contaminación acústica que realiza el Concello ratifican no obstante que calle Progreso, por ser la que tienen una mayor densidad de tráfico diario, y es además zona de paso de buena parte del servicio de autobuses, o de las ambulancias que atraviesan la ciudad, de punta a punta.

También la avenida de Portugal está en ese mapa, por razones similares al ser una arteria de conexión con el centro urbano y paso de ambulancias que llegan de buena de su extrarradio.