El personal de la Diputación de Pontevedra desembarcó ayer en San Martiño para iniciar los trabajos que permitan construir un segundo vial de conexión entre esta parroquia moañesa y la rotonda de acceso al Corredor do Morrazo. Funcionará como variante del lugar do Outeiro y en ese tramo la circulación será de sentido único, evitando así los importantes atascos que se producen en este acceso al Corredor, así como las situaciones de riesgo para conductores y peatones.

La obra, que fue planteada en el mes de diciembre por el alcalde, José Fervenza, será ejecutada en su totalidad con personal y maquinaria del organismo provincial. Fervenza resalta que los propietarios cedieron el terreno necesario para ensanchar un vial que en estos momentos es una pista forestal, se trata de la subida de A Peroxa, que parte del lugar de Fonte de Pedra. La superficie que tuvieron que ceder fue muy pequeña en cada caso.

La fecha de entrada en servicio del nuevo vial dependerá en gran parte de las condiciones del tiempo, aunque se espera que las obras no se dilaten mucho.

Se ensanchará y asfaltará, por lo tanto, un camino que tiene unos 600 metros lineales, para convertirla en una carretera adecuada para la circulación de coches.

Tráfico

Aunque la mayor concentración de problemas en la zona de Outeiro se generan durante las fiestas de San Martiño, con atascos constantes, la falta de seguridad es algo que los vecinos de la zona sufren todo el año. Los conductores que bajan desde el Corredor suelen superar con creces la velocidad establecida en la vía. De hecho, debido a este problema el Concello ya limitó la circulación a 30 kilómetros por hora y accedió a instalar bandas reductoras de la velocidad, tras la solicitud del Anpa de la Escola de Música.

Este nuevo vial permitiría el sentido único en un tramo de carretera particularmente estrecho. Un informe de la Policía Local será el documento que determine cuál de las dos carreteras tendrá un sentido ascendente y cuál descendente.