Nodosa ya es propietaria de su vecino astillero, Factoría Naval. La primera empresa acaba de firmar la escritura por la que pasa a convertirse en dueña de la quebrada firma, lo que incluye tanto las instalaciones y la concesión como el uso de los nombres del histórico constructor de barcos y de la filial Marín Luxury Yachts. Desde el 1 de febrero ha dejado de estar en vigor la regulación de empleo que afectaba a la veintena de trabajadores de la compañía comprada. Todos ellos se incorporan a la plantilla del comprador, tal y como incluía la oferta de compra.

Los responsables de Nodosa rubricaron ante la notaría la adquisición a finales de la pasada semana, de manera que a efectos legales estos son los primeros días de la nueva etapa empresarial. Si bien la adjudicación era sabida desde el año pasado, la firma notarial era el trámite que quedaba pendiente para que las dos empresas empezasen a funcionar como una. Así, ahora los esfuerzos se centran en homogeneizar procesos e integrar tanto a los trabajadores de la extinguida factoría como material, procesos y encargos de trabajo.

La empresa también se está ocupando de la imagen corporativa, de modo que no solo se incorpora el logotipo de Nodosa a catálogos y demás papelería de Factoría Naval, sino que el interior y exterior de este astillero también pasarán a asumir la nueva identidad a corto plazo. Desde la firma compradora apuntan a que "en principio" solo se baraja la utilización de la marca Nodosa, aunque legalmente se podría hacer uso tanto de Factoría Naval como de Marín Luxury Yatchs, el nombre que se había elegido en su momento para tratar de hacerse hueco en el segmento premium de las embarcaciones de recreo.

Nodosa, con 4,7 millones de euros, se situó por delante de Centro de Reparaciones Navales y Metalships&Docks en la puja por hacerse con Factoría Naval. Las propuestas económicas de estas otras dos aspirantes se mantuvieron sin cambios incluso al cierre del plazo de presentación de mejoras: 3,2 y 3 millones, respectivamente.

La pugna la ganó Nodosa después de haber planteado desde un principio los números más elevados. Además de optar por una cuantía significativamente mayor que la de sus competidoras, su oferta mostraba una apuesta por el empleo con el mantenimiento de la totalidad de los actuales 21 puestos de trabajo de Factoría Naval. Centro de Reparaciones incluía también este compromiso, mientras que Metalships garantizaba únicamente la continuidad de los puestos cualificados.

La plantilla de Factoría Naval recibió en su como "muy buena noticia" la oferta de Nodosa por el compromiso de mantenimiento de todos los puestos de empleo por parte de dos de las tres empresas que optan a la compra del astillero. El comité así lo manifestó, celebrando la apuesta por el empleo de la compañía compradora. Ésta pasa a tener ahora 75 empleados en plantilla, a los que se suman casi medio centenar de operarios de firmas auxiliares que desarrollan sus labores habitualmente en las instalaciones de la empresa.