El Concello de A Estrada tiene abiertos en estos momentos más de 300 expedientes de disciplina urbanística. El dato lo aportó el propio alcalde, José López Campos, en el marco de la sesión plenaria celebrada el pasado jueves. El titular estradense de Urbanismo, Alberto Blanco, confirmó en la mañana de ayer este extremo y reconoció que más del 90% de estos expedientes emanan de denuncias presentadas por particulares, si bien el Concello tramita algunos casos de oficio.

El jefe del ejecutivo estradense reconoció en pleno que la administración estradense carece de personal para acelerar la tramitación de unos expedientes que, por su complejidad, "cuesta finalizar y resolver". En esta misma línea se pronunció ayer Blanco Carracedo. "Cuando llegamos en 2011 no había nadie encomendado a la disciplina urbanística, con lo cual había 350 expedientes o más, todos metidos en un cajón", apuntó el concejal. Señaló que "no se respondía a nadie" y que ya en ese momento el Concello no tenía posibilidad de contratar a personal para que asumiese estas funciones.

El gobierno optó en aquel momento por realizar una encomienda de gestiones, tratando de poner al día este importante volumen de expedientes urbanísticos, entre los que, aseguró, figuraban casos prescritos y caducados.

El edil de Urbanismo explicó que se realizó una reorganización de efectivos municipales y una de las trabajadoras del departamento de Estadística se asignó al área de Urbanismo para prestar apoyo al departamento y llevar disciplina urbanística. No obstante, Blanco incidió en que "son muchísimos expedientes" los que hay que tramitar en un departamento que ya de por sí presenta una gran carga de trabajo.

Apuntó el concejal que "se van cumpliendo los plazos en la medida de lo posible". Asumió Blanco que Urbanismo precisa al menos dos administrativos más y señaló que el Concello solo tiene un técnico jurídico para este departamento, cuya eficiencia no dudó en reconocer públicamente.

El edil de Urbanismo subrayó la gran cantidad de oficios diarios que ha de atender este área municipal y no quiso dejar de subrayar que la rama de disciplina urbanística "pegó un cambio grandísimo". Pasamos de cero a lo que tenemos", apuntó. Comprendió Alberto Blanco que cualquier interesado tenga la pretensión de que su expediente se acelere lo máximo posible pero puso el acento en que "hay que cumplir con los trámites urbanísticos".

Reconoció también el edil que los expedientes de disciplina urbanística comportan importantes y variados trámites, señalando que en algunos casos el Concello precisa incluso de una autorización judicial. Al ser preguntado por cómo se originan este tipo de expedientes, el edil de Urbanismo señaló que más del 90% arrancan por denuncias entre vecinos. En buena parte de estos casos la denuncia está motivada por construcciones ilegales -muchas de ellas pequeñas construcciones- y cierres. Apuntó Blanco que estos últimos protagonizan muchos de los expedientes que el Concello tiene en curso, vinculándose algunos de ellos, por ejemplo, a cierres que invaden caminos.

Concluida la tramitación de este tipo de expedientes, si la persona que lo presentó no está de acuerdo puede presentar un recurso de reposición ante la administración municipal. Si ello no resuelve sus expectativas, algunas de estas denuncias continúan por la vía contencioso-administrativa. El edil estradense de Urbanismo calculó que aproximadamente el 30% de los expedientes de disciplina urbanística acaban en el juzgado.

Esta no es la primera vez que desde el gobierno local se reconocen problemas de personal en este departamento, una tónica que las restricciones a la contratación que proceden de la aplicación de la ley de estabilidad presupuestaria hace extensiva a otras muchas áreas de la gestión municipal. El alcalde reconoció recientemente que el Concello precisaría 40 trabajadores más para cubrir los servicios.