Cuando se le pregunta a los hosteleros qué es lo que más motiva a los turistas para elegir la zona de Deza como destino vacacional, la respuesta más habitual suele ser la ubicación geográfica. La situación de la comarca supone un perfecto enclave para acceder de manera sencilla y sin perder mucho tiempo, a muchos puntos de interés turísticos en la comunidad gallega.

Santiago de Compostela y las Rías Baixas se han convertido en las zonas más reclamadas por los visitantes durante los meses de verano. La proximidad a estos destinos, les ayuda a evitar los altos costes que puede acarrear hospedarse en hoteles de la costa, que en verano se encuentran, generalmente, completos. Así es que aunque los turistas no acudan a la comarca de Deza única y exclusivamente para visitar el entorno, sí hacen que los hoteles de la comarca se llenen. Para muchos, resulta una sorpresa encontrarse con la tranquilidad que rodea al enclave de la comarca, haciendo que se animen a realizar turismo local o a visitar lugares como el Monasterio de Carboeiro, la fervenza do Toxa o la playa fluvial de A Carixa.

La masificación de gente en muchas ciudades también ha influido en el aumento de visitantes, que buscan poder desconectar del ajetreo y encuentran en los parajes de Deza la respuesta perfecta a su demanda.