Estaba prevista su salida de México en dirección a Madrid a la una de la madrugada de ayer, pero finalmente los restos mortales del empresario forcaricense Antonio Arca Brey, asesinado en Culiacán el pasado martes, no viajaron hasta la capital madrileña en la jornada de ayer.

A última hora de la tarde, la familia del finado señaló que las últimas informaciones que tenían apuntaban a que sus restos mortales sí podrían salir en la madrugada de hoy hacia la capital española. Desde allí serán trasladados en coche hasta Forcarei, a donde esperan que llegue mañana por la tarde, según explicó su hermana, Lidia Arca. La capilla ardiente se instalará en el tanatorio de Cachafeiro y, si se cumplen los últimos plazos anunciados, su funeral se celebrará, previsiblemente, el próximo miércoles, día 19, tal y como apuntó la hermana.

La muerte violenta de Antonio Arca, de 41 años, está siendo investigada. La familia todavía desconoce la versión oficial de los hechos. Todo apunta a que fue víctima de un atraco, que sus asesinos lo golpearon y que acabaron disparándole.