Crespo cuestiona al gobierno por su pobre capacidad para atraer proyectos externos

"La gestión de este gobierno con otras administraciones tiene un balance: cero euros", declaró el también diputado provincial, quien atribuye esta situación a la falta de experiencia y de habilidad del ejecutivo que dirige Rafael Cuiña. El jefe de la oposición lalinense entiende que el grupo de gobierno está todavía, luego de un año en el poder, "viviendo de rentas" y tratando de que se visibilice su gestión en tareas menores como desbroces. Uno de los asuntos que trató con más calma fue el proyecto de adecuación de la Rolda Leste. A su entender es inaceptable que el Concello haya esperado tanto tiempo para licitar las obras. Crespo se refiere, en concreto, a los 300.000 euros que había dejado su ejecutivo de fondos provinciales. Entiende que el ejecutivo local debió licitar al menos este proyecto para atender la reparación del firme en los tramos en los que está más deteriorado, como el que separa la calle Garda Civil de la glorieta de Alto de Vales. Para el popular el problema surge cuando la Diputación impide al Concello licitar conjuntamente la reparación de esta vía de circunvalación en un único proyecto. El reparo se debe a que los 300.000 euros iniciales proceden de un plan del año pasado, mientras que el medio millón restante es del ejercicio en curso. Ahora, a su juicio, las obras en la primera fase de la Rolda Leste no comenzarán hasta el mes de agosto y por tanto la intervención integral seguirá pendiente tras el verano. "La estrategia era alargar todo, pues hicieron lo mismo con la biblioteca, para que no pareciese que estas obras son hijos nuestros, y darse méritos para el proyecto de la Rolda Leste, donde el PP dejó 300.000 euros".

José Crespo volvió a sacar a la palestra el déficit de gestión del gobierno local en comparación con su etapa al frente de la Alcaldía. En el caso de esta ronda urbana aseguró que tenía planeado implicar en este proyecto a Fomento, Xunta y Diputación para que del Concello no saliesen de recursos propios más de 200.000 euros. "Esperaron para sacar el proyecto todo junto y les salió mal y eso para mí supone un déficit de gestión".

En otro orden de cosas, Crespo confirmó su marcha de la Diputación. A comienzos de esta semana presentó su renuncia en la cámara provincial para centrase así en el Senado y en la administración municipal. Como estaba previsto cederá su escaño en la institución provincial al alcalde de Agolada, Ramiro Varela. La toma de posesión de éste último está prevista para el pleno de agosto. Crespo recordó que aunque legalmente podría compatibilizar los tres cargos -como hizo desde las elecciones generales de diciembre del año pasado- sí ve conveniente dejar la Diputación. En todo caso anunció que permanecerá vigilante para que Lalín garantice lo que le corresponde y lo hará de la mano de Varela. En este sentido dijo que en la capital dezana están las oficinas comarcales del ORAL, la finca de Mouriscade, el vivero de empresas, el centro virtual de la cultura castreña o el laboratorio del Pazo de Liñares; servicios que bien son de la Diputación o tiene compromiso de financiación para los mismos. En esta línea censuró que el gobierno provincial no asumiese todavía la parte proporcional del gasto del Pazo de Liñares, con un centro científico que, según él, funciona en precario con el consentimiento del grupo de gobierno. Y pidió que de una vez se resolviese la contratación para la puesta en marcha del centro virtual Castrodeza, habilitado en el consistorio. También criticó el estado de los viales provinciales o que se permitiese que el personal de las brigadas de mantenimiento de las carreteras pontevedresas estuviese de vacaciones este mes y el próximo mes.

"Voy a intentar ser un buen senador, un puesto que es apetecible para todos, pero si estoy allí es gracias a mi bagaje en Lalín". Por ahora desconoce si repetirá al frente de alguna comisión o si ostentará otras vocalías dentro de la Cámara Alta.