El gobierno lalinense coordinará a través de los servicios sociales municipales un programa específico para garantizar el sustento alimenticio de los niños de familias en riesgo de exclusión social o aquellas más vulnerables. El Concello realizó un análisis con aquellas familias cuyos pequeños precisan ayuda alimentaria, que no podrán recibir en los comedores escolares ante el inminente remate del curso. Esta prestación se garantizará mediante el reparto a domicilio de la comida.

Para desarrollar esta propuesta el Concello ha llegado a un acuerdo con la dirección de la residencia Nosa Señora das Dores, en cuyas instalaciones se elaborarán los menús, que luego se harán llegar a los domicilios. Así, destaca el ejecutivo, se pretende dar cumplimiento a un doble objetivo. Por un lado se garantiza el sustento alimenticio de los niños en riesgo de vulnerabilidad y por otro se respalda el derecho a la intimidad de los menores y sus familias. La iniciativa se enmarca en la línea de acción aprobada recientemente por el Parlamento de Galicia en la que se vela por el sustento de los niños. La apuesta por que la coordinación recaiga en los servicios sociales es porque este departamento "conoce la realidad concreta y los recursos de la localidad". La colaboración de la residencia de As Dores permite que el ayuntamiento no tenga que plantear la apertura de los comedores de los centros educativos, como en otros municipios, que podrían desarrollar una iniciativa semejante, pero en los comedores de los colegios.

El grupo de gobierno precisa que la iniciativa se prestará a las familias lalinenses mediante el servicio de Axuda no Fogar en la modalidad de libre concurrencia y será coordinado por el departamento municipal de Benestar, que dirige la concejala Paz Pérez. Por el momento no se ha concretado una fecha para el comienzo del reparto de los alimentos, aunque parece inminente, pues los pequeños finalizan las clases este viernes.