Si ya lo dice el refrán, "hasta el 40 de mayo no te quites el sayo". Y aunque ayer las temperaturas ya anunciaban la proximidad del verano, al verdad es que el mes que acaba de terminar destaca, sobre todo, por sus vaivenes en los termómetros. Marcos Diéguez tiene desde hace años una estación meteorológica en Vilarmaior, incluida en la red de Meteoclimatic, y apunta que "hubo mínimas de cero y 0,4 grados, muy extremas para ser finales de mayo ya que durante esta época las noches son más cortas". Diéguez añade que aunque la primavera es una estación con muchos cambios, "estas variaciones de temperatura serían más normales durante el mes de marzo".

Hay que destacar, sobre todo, lo que ocurrió en las jornadas del 18 y del 19. En Lalín se pasó, en un intervalo de 24 horas, de una temperatura máxima de 25,5 ºC a menos de la mitad, 12,8, según los datos de Meteogalicia. En Vilarmaior, el descenso fue de 24,1 a 11,8. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) se refiere a esta bajada como un "descenso excepcional", puesto que las temperaturas disminuyen más de 12 grados de un día para otro. Pero es que además, las diferencias de calor entre el día y la noche tuvieron especial protagonismo entre los días 11 y 19. Meteogalicia señala que en esas nueve jornadas, cada día hubo entre cuatro y ocho horas en que los termómetros marcaron menos de 7 ºC.

Y además del frío, la lluvia. A pesar de que en todo el mes se recogieron en Mouriscade 48,62 l/m2, la cuarta parte de los que 122 que cayeron en abril, para los dezanos mayo pasará al recuerdo como otro mes más con el paraguas, puesto que las precipitaciones se concentraron en la última semana y con los ocho temporales que asolaron la comarca durante el invierno aún en la retina. Ocurrió lo mismo en cuanto a precipitaciones en la estación de Meteogalicia en Serra do Faro, con 67 litros frente a los 127,9 del mes precedente, o en la de Pereira, en el municipio de Forcarei, con, respectivamente, 120,6 y 232,2 l/m2.