Al gobierno lalinense le preocupa, y mucho, la constante pérdida de población, que podría desencadenar en que el municipio dejase de ser de primera categoría. Caer de los 20.000 habitantes supondría una importante merma en las transferencias de otras administraciones, además de consecuencias de índole política.

La sangría demográfica que afecta a Galicia también es sensible en la capital dezana. Para ello, el ejecutivo ha puesto en marcha una campaña de empadronamiento que, bajo el lema, Empadrónate: Lalín suma, se asienta en dos pilares fundamentales. Por un lado se apela a la concienciación social de las personas -hay más de un millar de viviendas con inquilinos censados en localidades limítrofes- y se programarán reuniones con agentes sociales. Además, un técnico municipal ha comenzado las rondas de visitas a los domicilios, sobre todo en las calles con mas foráneos como la B, para proponer a los ciudadanos que pasen a engrosar las listas del padrón. El portavoz del grupo de gobierno, Román Rodríguez, admite que parte del éxito de la campaña pasa por la sensibilización de los vecinos sobre las ventajas que tiene estar empadronado, una vez que no se pueden tomar otras medidas como un alza en las tasas de servicios públicos a las personas que sean de otras localidades. Para ello, el Concello realizará una campaña con cartelería en las que se exponen algunos de los argumentos de la misma.

El plan está acompañado de bonificaciones fiscales para las pequeñas empresas que decidan asentarse en Lalín, que deberán contratar a personal de la capital dezana. Además de las deducciones del plan Emtra, el gobierno local maneja otras iniciativas que, en bonificaciones de tributos, podrían llegar a suponer entre 500 o 1.000 euros para los emprendedores.

La concejala de Actividade Económica, María José Batán, indicó que esta propuesta cobrará fuerza para el período comprendido entre los meses de junio y diciembre, aunque no se descarta extenderlo al próximo año si, desde el punto de vista económico, fuese asumible para la administración municipal. Román, que estuvo acompañado por la edil de Benestar Social, Paz Pérez, indicó que el constante saldo vegetativo negativo está dejando a Lalín al borde de dejar de ser un concello de primera categoría. La pérdida de población también se debe en parte a los foráneos que abandonaron la localidad al quedarse sin empleo por la crisis.