El campo de fútbol de la parroquia cruceña de Piloño -de titularidad municipal- ha sido víctima de los amigos de lo ajeno, que en los últimos días han desvalijado las instalaciones, objetivo de los ladrones desde que la zona deportiva está en desuso.

El Concello presentó ayer una denuncia ante la Guardia Civil por el robo de toda la techumbre que cubría las gradas, es decir, un quincena de chapas desplegadas en una superficie de unos 15X6 metros. Los vecinos de la zona notaron su falta el pasado miércoles, y varios testigos aseguran que el sábado el campo presentaba un aspecto de normalidad.

Además de las placas metálicas de las gradas, los cacos también sustrajeron dos focos del alumbrado -pegados a las gradas-, dos calentadores eléctricos, el cuadro eléctrico, la bola de aire del motor de agua y las tuberías de cobre del vestuario. El Concello valora el material sustraído en más de 3.000 euros.

Se cree que los ladrones actuaron de noche, puesto que, de otro modo, se habría notado su presencia, a pesar de que el terreno de juego se encuentra apartado de las viviendas, en una zona de monte. Las huellas del vehículo en el que cargaron el material todavía podían verse ayer en las inmediaciones.

No es la primera vez que los amigos de lo ajeno actúan en el campo de Piloño. En otra ocasión se llevaron el fregadero del bar, y los actos vandálicos se sucedían "cada fin de semana", recuerda el edil de Obras y Equipamientos, Andrés Lareu. Por otra parte, hace quince días los vándalos entraron en el campo de O Camballón y destrozaron las puertas de entrada.