El concejal de Urbanismo de Lalín, Román Rodríguez, reveló ayer que el concello ya ha aprobado cuatro convenios con propietarios de terrenos anexos a la Avenida Xosé Cuiña para que los cedan con el fin de conseguir la superficie necesaria para el espacio público contiguo al Lalín Arena, actualmente en fase de construcción.

El edil indicó que ya se han cerrado cuatro acuerdos y que otros tantos se encuentran en tramitación. En todos los casos, los propietarios ceden su superficie en la zona a cambio de aprovechamientos urbanísticos en el SUE-3 o plan parcial de la Avenida Xosé Cuiña, que se encuentra paralizado desde hace meses por parte del concello ante el desinterés de los afectados por el parón de la construcción.

En este contexto, la consecución de los convenios, que está facilitando bastante las cosas al concello a la hora de conseguir los terrenos del parque del Lalín Arena, demuestra el interés y el potencial del proyecto urbanístico del SUE-3, ya que los propietarios se arriesgan a no hacer efectivos sus aprovechamientos en muchos años si el plan no sale finalmente adelante.

Al respecto, el edil de Urbanismo admitió que el plan de la Avenida Cuiña se encuentra "completamente parado" y que el concello está actuando con el "principio de prudencia" al comprobar que no se dan las mejores condiciones y posibilidades para su desarrollo a corto plazo.

Hace meses, y tras las quejas de los afectados del plan de Lalín de Arriba por tener que abonar 2,1 millones de euros por la urbanización y no poder vender sus solares por la falta de interés del sector, el concello decidió consultar a los dueños de los terrenos del SUE-3 y casi todos le solicitaron que ralentizara el proceso para no verse en la misma tesitura que sus vecinos.

Román Rodríguez dejó claro ayer que el SUE-3 no arrancará a corto plazo "xa que non é o mellor momento", pero dejó claro que se trata de un proyecto muy atractivo para el concello y que se impulsará a medio plazo. Eso sí, insinuó que su puesta en marcha será cuando la recuperación económica sea firme, ya que cree inviable que se acometa por fases y los propietarios tendrán que abonar 4,8 millones de euros por la urbanización.

En cuanto al punto en que se paralizó el proyecto, el edil indicó que había concluido la fase de exposición pública tras la aprobación inicial del plan parcial. Así, en caso de que se retome, el concello debería resolver las alegaciones y llevar el documento a aprobación provisional antes de remitirlo a la Xunta.

El SUE-3 es un proyecto urbanístico que afectará a una superficie de 140.000 m2 entre las avenidas Xosé Cuiña y de Madrid y cuenta con capacidad para albergar hasta 671 viviendas.