En un día como el de ayer Obélix hubiese querido ser cerdedense. Se habría olvidado de su temor a que el cielo se desplomase sobre su cabeza y animaría a su buen amigo Astérix a compartir mesa y mantel para dar buena cuenta de los 50 jabalíes apresados por los cazadores de Cerdedo y Quireza. Si los dos simpáticos galos se hubiesen dejado caer por la III Festa do Xabarín su pasión por este plato habría quedado ampliamente saciada. Y es que los tres expertos cocineros que gobiernan los fogones para esta cita gastronómica prepararon para la ocasión en torno a 1.600 kilos de jabalí, acompañado por guarniciones de patatas, setas y castañas. No tuvieron a estos personajes como comensales -aunque estuvieron presentes a través de las referencias realizadas por el pregonero, Xabier Fortes- pero sí a cerca de 5.000 personas que pidieron catar tan suculento bocado.

Un año más la respuesta de foráneos y visitantes pulverizó todas las previsiones de la organización de esta fiesta. Los datos que en la tarde de ayer barajaban los organizadores permiten apuntar que en torno a 7.000 personas se acercaron hasta Cerdedo en la tercera edición de este certamen. Más de 2.300 comensales se habían asegurado con anterioridad un puesto en las grandes carpas instaladas para la degustación y otras 1.300 se animaron a hacer cola para conseguir una ración. Además, se sirvieron 1.000 raciones para domicilios. Aunque entre los pucheros diese la impresión de que había jabalí para rato, sólo sobró para que pudiesen pinchar algo quienes trabajaron en la organización de esta fiesta. Para atender a esta demanda, desde las 06.00 horas Antonio Bugallo, Adolfo Regueiro y Carmiña Troitiño, junto a diversos colaboradores, comenzaron a guisar el jabalí y a las 08.00 empezaron con las patatas. A las 14.00 horas llegarían los avisos por megafonía que informaban de que ya se habían vendido todos los tikets.

Antes de que arrancase la degustación, el director de informativos de TVE en Galicia, Xabier Fortes, se encargó de leer el pregón. Hiló su exposición con referencias a la práctica de la caza y la pesca, que entiende como expresión de la conexión entre el hombre y la naturaleza, y aludió al manjar que constituía el jabalí para los galos, pasando a referirse también a la pasión del famoso Obélix por este plato. Tras su intervención tomó la palabra el alcalde de Cerdedo, José Balseiros, que no quiso olvidarse en este día de dar las gracias "aos verdadeiros artífices" de esta fiesta gastronómica. Citó a los cazadores -cedieron gratuitamente todos los jabalíes cazados-, a los cocineros y a las docenas de voluntarios que participaron en la organización. No se olvidó tampoco de dar gracias a todos los vecinos que cedieron sus fincas para garantizar espacio gratuito para aparcar y a todos los que pusieron, de un modo u otro, su granito de arena para que esta fiesta sea ya una cita ineludible. Acompañando al regidor cerdedense se encontraba el vicepresidente de la Diputación, José Manuel Figueroa, el alcalde de Lalín, Xosé Crespo, el de Forcarei, David Raposeiras, y los mandatarios de Cotobade y A Lama, además de un amplio grupo de autoridades locales.

El Jabato de Plata recayó este año en los cocineros. Os Abrentes de Cerdedo, la Banda de Gaitas de Barbude y las actividades de Cerdedo Natura animaron el ambiente. El tiro con arco y la feria de perros de caza mayor fueron otro de los atractivos, aunque uno de los principales focos de actividad volvió a ser Expocerdedo. Muchos de los expositores ya reservaron su sitio para la próxima edición. De todo, como en botica, y rico, rico.