Un electromecánico andaluz empadronado en Cambados lucha desde hace dos años para que una compañía telefónica le borre del registro de morosos, en el que le incluyeron supuestamente a raíz de un fraude cometido por otro andaluz, hijo de un hombre que se llama como él, y por un importe de 60.000 euros.

Emilio Cruz García denunció el caso en los puestos de la Guardia Civil de Cambados y Macael (Almería) y en los juzgados de Purchena (Jaén), y la autoridad judicial ordenó a una multinacional telefónica que le borrase provisionalmente del registro de deudores (el Asnef). Según Emilio Cruz, que estos días está en Cambados, la operadora telefónica así lo hizo, pero hace unos días fue a su banco y se enteró de que estaba de nuevo inscrito en el Asnef.

El denunciante se muestra muy contrariado, pues figurar en ese fichero le condiciona en muchos aspectos. "No puedo solicitar un préstamo de ningún tipo y tenía una tarjeta de crédito que me quitaron y ya no me volvieron a conceder", manifiesta.

Emilio Cruz García se enteró de que otra persona había suplantado presuntamente su identidad en febrero de 2012, cuando realizó una compra por internet y le contestaron que no podía completarse la operación porque tenía un problema con la tarjeta de su banco. Según él acudió a la sucursal para enterarse de lo que sucedía "y me dijeron que me figuraba una deuda de 60.000 euros con Vodafone y de 1.100 con Movistar".

Puso entonces denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Cambados y se inició una investigación. La pista que aportó era la dirección que figuraba en las deudas con las compañías telefónicas, y que se correspondía con un domicilio de Macael. Según el denunciante, el poco tiempo la Guardia Civil llegó al presunto estafador, hijo de una persona llamada también Emilio Cruz García.

Esta persona, según la hipótesis del electromecánico empadronado en Cambados, se hizo con su número de carné de identidad, "posiblemente a través de internet, porque una vez salí en un edicto de la administración", y formalizó con él varios contratos con las dos compañías telefónicas, para lo cual dispuso de diferentes números de teléfono. Y empezó a gastar, mientras las facturas le iban a Emilio Cruz empadronado en Cambados. "Lo que no me explico es como no cortaron antes la línea al ver que no cobraban", apunta Cruz García en referencia a las empresas de telefonía.

El hombre, natural de Granada y de 54 años, sostiene que se puso entonces en contacto con las dos operadoras de telefonía, pidiéndoles que le quitasen del fichero Asnef porque habían suplantado su identidad.

Según él Movistar lo hizo inmediatamente, pero Vodafone no, de ahí que recurriese al juzgado, que sí ordenó la retirada provisional de sus datos del registro de morosos. "Y lo hicieron, pero acabo de enterarme de que vuelvo a estar en él", manifiesta desde su casa de Cambados.