El bombero del parque de Ribadumia que tuvo que ser evacuado y atendido tras sufrir un golpe de calor fue ya dado de alta. Fuentes sindicales atribuyen esta indisposición al poco personal de los bomberos, que acudieron al incendio con una dotación de tres personas cuando reclaman un mínimo de cinco.

Esta dotación de O Salnés tuvo que hacer frente en solitario al fuego durante una hora hasta que llegaron los bomberos de O Morrazo, según estas mismas fuentes. Ayer permanecía una dotación en la zona, todavía con los restos humeando. Al mediodía se personó la policía científica de la Guardia Civil.

La indignación era elevada por la tardanza de los medios pero sobre todo por la negativa a actuar de las brigadas antiincendios forestales, incluso hasta el punto de que los vecinos llegaron a lanzarles alguna piedra al ver que se iban del lugar sin intervenir cuando todavía no había bomberos.