Tras la junta general de accionistas que Ence celebró el pasado mes de marzo en Madrid, el consejero delegado del grupo, Ignacio Colmenares, era claro con respecto a la planta de biomasa que Ence se había adjudicado en el concurso celebrado en enero: "O se hace en Pontevedra o no se hace", explicó.
Aseguró entonces que dicha planta, "inicialmente, nosotros la pensábamos hacer en León" pero señalan que la prórroga de la concesión en Pontevedra hizo que la balanza se decantase hacia la ciudad del Lérez: "La sociedad nos ha dado una prórroga de la concesión, pues si vamos a generar empleo, qué mejor que hacerlo en Pontevedra". Señalaba también que las necesidades de combustible y materia prima para la planta hacían que Pontevedra fuese la mejor ubicación. "De los sitios que teníamos hace dos meses (decía en marzo) el único que parece que puede tener la rentabilidad necesaria es Pontevedra", afirmaba.
Entonces indicaba también que la decisión final sobre si se iba a construir o no la planta estaba pendiente de los estudios de viabilidad y rentabilidad: "estámos trabajando (decía en marzo) en varios frentes, con los proveedores de equipos en ver si económicamente esto es viable y estamos acabando de estudiar bien todo el combustible necesario, si lo hay y al precio correcto". Aseguraba que la decisión final se anunciaría en un mes, es decir, en abril, pero por ahora esta decisión sigue sin producirse. Incluso ha llegado antes este sorpresivo anuncio de Huelva. Ence estima que la planta de biomasa creará 30 puestos de trabajo industriales y 300 indirectos.
