Pese a que Vicente García Legísima mostraba ayer su satisfacción por el contenido del auto del juzgado pontevedrés, en alguno de sus párrafos se deja entrever que la actitud del gobierno local no fue del todo correcta y cabría ver, de nuevo, una "desviación de poder".

Así, en la página 7 del auto el juez admite que podría "ser criticable la toma de este acuerdo (de febrero y marzo de este año) en el mismo pleno en el que se acuerda dar cumplimiento a la sentencia judicial" que anuló la retirada de las dedicaciones exclusivas "por cuanto se genera la sospecha de que el fundamente del nuevo acuerdo pueda ir en la linea del anterior, que fue anulado por considerarse adoptado por desviación de poder".

No obstante, esas "sospechas" no pasan de ahí y el propio auto recuerda que aún hay pleitos pendientes sobre el fondo del asunto. Así, Jacobo Moreira ya solicitó en el Contencioso número 3 la nulidad de esos polémicos acuerdos de febrero y marzo, y María Biempica (anterior edil del PP y ahora no adscrita), tiene su propia reclamación por su cuenta.