La fecha del juicio está todavía por determinar. Todavía resta que las defensas de los dos acusados presenten sendos escritos y que las pruebas solicitadas sean aceptadas o rechazadas. Una vez finalizado el proceso, se señalará la fecha para la constitución del jurado y la celebración de la vista.

En el caso del fiscal, que acaba de presentar su escrito de acusación, interesa la declaración de 40 testigos y 21 peritos. Además del visionado de varios fragmentos del documental "Santoalla", de Andrew Becker y Daniel Merher, que ya ha recorrido varios festivales y ha sido premiado en Austin y Tallgrass. El film recoge testimonios y grabaciones que el fiscal considera importantes para el esclarecimiento de los hechos.

El documental puede verse este fin de semana en O Barco y A Rúa, lugares elegidos para su estreno comercial.

La primera opción que plantea el fiscal Miguel Ruiz en su escrito de acusación señala a Juan Carlos R.G. como el autor del crimen y la persona que tomó la decisión de matar a Venfondern. A las 13.15 horas del 19 de enero lo esperó a la entrada del pueblo porque sabía que tenía que pasar por ahí cuando regresase de hacer la compra. Portaba, siempre según el relato del fiscal, la escopeta con la que habitualmente paseaba y cuando llegó Martin le forzó a parar y, "a menos de un metro de distancia, de manera totalmente sorpresiva y sin la más mínima posibilidad de reacción o de defensa", ya que estaba sentado en el asiento del conductor, "le disparó un tiro por la ventanilla, lo que provocó su muerte inmediata".

La idea principal del fiscal es que minutos después apareció su hermano Julio, que subía con el tractor desde Petín y se encontró con el cadáver en el coche. Entonces, "con intención de que el crimen de su hermano quedara impune", aparcó su tractor y condujo el vehículo por pistas forestales hasta la zona "As Tozas de Azoreira", un paraje "de nulo tránsito, de muy difícil acceso y vedado a la caza". Escondió el coche entre unos pinos, sacó el cuerpo y a decenas de metros de distancia le prendió fuego, relata el fiscal.

La segunda opción plantea que ambos hermanos, de "mutuo acuerdo" y en ejecución de "un plan preconcebido e ideado por Julio R.G.", decidieron acabar con la vida de Verfondern. Los hechos se habrían sucedido de la misma manera, siendo Juan Carlos el autor del disparo. Su hermano llegaría igualmente unos minutos después y se llevaría el coche para ocultar el cuerpo y conseguir que el crimen que ambos "acababan de cometer" quedase impune. En ejecución del "plan ideado" el final sería el mismo. Un vehículo oculto en una zona intransitable y un cuerpo quemado en una hoguera hasta que los restos fueron hallados, cuatro años y medio más tarde por los agentes de la Guardia Civil que realizaban la inspección ocular.